Nagore, a Blanca: "Este programa ha merecido la pena gracias a ti"

'Acorralados' toca a su fin. Es momento de echar la vista a atrás descartando sinsabores e intentando quedarse sólo con lo bueno. Así, Blanca se ha sincerado con Nagore, bien arrebujadas las dos entre mantas, confesándole que los mejores momentos del concurso los ha vivido a solas con ella: "Los ratos donde más me he reído, donde mejor me lo he psado, donde más comunicación he tenido, donde más he sido yo, las cosas que nos hemos dicho de corazón a corazón, hemos estado solas tú y yo, y eso ha sido muy bonito".

Preciosas palabras a las que Nagore correspondió de la misma manera: "Eres lo mejor de este pograma. Este programa ha merecido la pena gracias a tí, que lo sepas".

No hay duda de que entre Blanca y Nagore se ha creando un fuerte vínculo de amistad. Pero cada vez son más los motivos que inducen a la ex GH a sospechar que su amiga puede estar sintiendo algo más por ella. La aristócrata se pasa las noches toqueteándola y preguntándole detalles morbosos de su relación con Sofía y sus fiestas locas entre el ambiente gay. Por no hablar de cierto sueño tórrido que, mucho se teme, podría incluirla. Confiesa, medio en serio y medio en broma, que siente miedo de que, en uno de esos calores nocturnos, Blanca se le "eche encima".

También la futura suegra de Nagore, Bárbara Rey, manifestaba durante la gala su preocupación por el creciente acercamiento físico y sentimental de Blanca hacia Nagore: "No hay noche en la que no le esté metiendo los dedos para preguntarle qué se siente, qué no se siente, qué pasa...", observaba.

"¿El horno no está para bollos? El horno está más para bollos que nunca...", comentaba la prometida de Sofía Cristo tan mordaz como siempre. Posteriormente, bromeaba con Jorge Javier Vázquez sobre este particular: "Te digo yo que esta termina haciendo la uve doble".

A Blanca, madre de familia, no le hacen ninguna gracia que se ponga en entredicho su condición sexual. Tanto ella como su hermana en plató han asegurado rotundamente que únicamente le gustan los hombres, o como dice Mercedes de Borbón: "le gustan los 'Calipos' más que el arroz con leche".