Marina, una 'Cristi adicta' sale del armario sobre la pasarela de 'Cámbiame'

Con las ideas muy claras, Marina le dijo a sus padres que se iba a dormir a casa de una amiga para estudiar juntas y terminó a más de 500 km de su casa, subida en la pasarela de ‘Cámbiame’ y gritando a los cuatro vientos que le gustaban las chicas. Cristina Rodríguez no sabía cómo actuar porque Marina es una de sus ‘Cristi adictas’, pero ha decidido dar el paso y ser ella la que cumpliera el sueño de Marina y quién la enseñara a quererse todo el rato y no solo de vez en cuando.

Marina no es solo fan de Cristina Rodríguez, sigue por toda España a artistas de la talla de Malú. Una afición tras la que Marina intentaba distraer su mente para no hacer frente a sus problemas de autoestima y el miedo a confesar a todo el mundo su homosexualidad. María Villalón, la ganadora de la primera edición de ‘Factor X’ y amiga de Marina, ha querido acompañar a Marina en su gran día porque asegura que la participante es una “bellísima persona” y que se merece eso y más.

Todo estaba preparado para que Marina tuviera su gran momento y le confesara a sus padres que le gustan las chicas, pero al escuchar al padre de Marina explicarle a Carlota Corredera como habían reaccionado al saber que su hija les había mentido para venir a ‘Cámbiame’, Cristina Rodríguez le ha entendido a la perfección porque a ella, Marina también le había fallado. La aspirante al cambio de había saltado las normas del programa y se había mirado su nuevo peinado en un foco del cuarto de baño. Cristina no podía entender por qué Marina se estaba comportando así y por qué estaba juzgando su cambio sin haberse visto bien.

Por una vez, Cristina se ha mantenido firme en su decisión y ha decidido no ser complaciente con la participante y ha continuado con el cambio que tenía pensado para ella. Cristina Rodríguez ha querido convertirla en una nueva Marina capaz de quererse más y a la que solo le importe la opinión de los suyos y aunque, tenía miedo a que el cambio horrorizara a Marina tras ver su reacción al verse el cabello, pero la coache ha respirado tranquila cuando ha visto que la participante estaba feliz con el gran paso que acababa de dar y su nuevo look.

Guapísima y emocionada por la oportunidad que estaba teniendo, Marina ha respirado profundo y ha intentado explicarle a su padre que tenía algo que contarle que si no se lo decía sobre la pasarela de ‘Cámbiame’ sentía que jamás se lo podría contar. Estaba tan nerviosa que no era capaz de mirarle a los ojos pero finalmente, Marina ha pronunciado las palabras que la liberaban sexualmente: “Me gustan las chicas”. Algo que sus padres ya intuían y que han aceptado con mucha naturalidad y cariño.