El Girona FC logra el ascenso a la élite que le debía la historia

La escuadra dirigida por Pablo Machín, el guía que ha encaminado al conjunto catalán hacia la categoría más alta en los 86 años de vida del club, dependía de sí mismo para confirmar el ascenso en esta penúltima jornada de LaLiga 123 y lo ha logrado con un margen amplio que ha sido la culminación de un proyecto que se gestaba desde 2014 cuando el técnico soriano asumió las riendas de un equipo que era colista.

Si miramos hacia el pasado, el Girona FC tuvo la primera oportunidad de ascender en 2013, con Rubi en el banquillo y tras cerrar la liga en cuarta posición. Los rojiblancos superaron al Alcorcón en semifinales, pero el premio final del Playoff estuvo a favor del Almería, con un global en la eliminatoria final de 4-0 para los andaluces.

Dos años más tarde, en 2015, la crueldad se cebó aún más con el conjunto ya de Pablo Machín. En la última jornada del curso necesitaban una victoria para subir, pero el Lugo les ahogó la fiesta en el descuento al empatar el encuentro (1-1). En la promoción, el Zaragoza les eliminó cruelmente en primera ronda al tener el 'average' a favor (4-4) pese al 0-3 del Girona en La Romareda, con un 1-4 en Montilivi.

La estacada más reciente se produjo la temporada pasada, cuando el CA Osasuna volvió a dejar a los 'blanquivermells', que habían superado al Córdoba en la semifinal de la promoción, con la miel en los labios en la ronda final por el ascenso. Una derrota en El Sadar por la mínima (2-1) no dio pie a la remontada en Girona, y sucedió todo lo contrario con una derrota también en Montilivi (0-1).

En la tercera tentativa consecutiva, la cuarta en cinco años, el Girona por fin pudo celebrar un ascenso histórico y sin la presión ni ascuas de tener que vivir otra promoción. Con esa última jornada de margen, el empate que valía tanto al Girona como al Zaragoza para cumplir los sendos objetivos se dio y la afición pudo celebrar con el equipo el estar, en la temporada 2017/18, entre los mejores.

No obstante, las últimas semanas han sido movidas en Girona. El ascenso bien pudo haberse consumado antes, pero las derrotas ante el Levante y el Nàstic de Tarragona y el empate ante el Alcorcón pospusieron la fiesta. Sólo los tropiezos de los inmediatos perseguidores ayudaron a mantener la segunda posición, sólo por detrás de un Levante campeón hace semanas.

Además, antes de la derrota en Tarragona, se produjo un incidente con un miembro del equipo insultando a la afición que finalmente no fue más allá de un expediente y de un comunicado de la plantilla pidiendo perdón y unidad, la misma que les ha llevado este domingo a arropar al equipo y a acompañarlo en volandas a Primera.