Julio Senn: "Los casos de Messi y Cristiano distorsionan la realidad porque son puntuales"

"Los casos de Leo Messi y Cristiano Ronaldo distorsionan la realidad porque son casos puntuales debido a la multitud de patrocinadores que tienen. Ni siquiera entre ellos tienen algo que ver. Cada caso es un mundo", expuso Senn en una mesa de debate celebrada este miércoles en la sede de la Asociación de Prensa de Madrid bajo el título 'El fútbol español en la encrucijada de una fiscalidad mutante e insegura'.

El abogado añadió que la industria del fútbol supone "un 2% del PIB español" y que tiene "300 millones de beneficios antes de impuestos" actualmente, remarcando que en "cuatro años se han rebajado más de 500 millones de euros" de la deuda que tenían los clubes con la Hacienda.

El que fuera director general del Real Madrid señaló que entre Primera y Segunda División esta temporada se habían generado "3.400 millones de euros" de beneficio y, rotundo, explicó en su ponencia que "no es cierto que los clubes españoles lleguen a las finales por sus ventajas fiscales".

Senn advirtió que el "95% de casos de futbolistas españoles con sociedades de imagen en España, Hacienda no los ha llevado por la vía del delito porque España ha sido pionera al regular los derechos de imagen", aunque ahora Inglaterra ha "tomado la delantera".

"En la Premier, primero, un club puede utilizar un 15 por ciento de sus ingresos para el pago de derechos de imagen. Y segundo, un futbolista tiene como máximo un 20 por ciento de su salario en base a derechos de imagen", expuso.

"Los deportistas tienen un gran interés social, por lo que las sociedades de derechos de imagen son legales. No generalicemos en unos pocos casos. El fútbol español sí paga impuestos", concluyó el economista.

Julio Senn estuvo acompañado en su mesa de debate por el Fiscal Anticorrupción, Tomás Herranz, la exsubdirectora general de Ordenación Legal de la Agencia Tributaria, Clara Jiménez, y de Alberto Palomar, profesor de Derecho Administrativo de la Universidad Carlos III.

"Lo fundamental de defraudar es engañar", aseguró Tomás Herranz en su ponencia, basada en la exposición de numerosos artículos referentes al Código Penal. "Si lo que se hace no se ajusta a la verdad podría concurrir en delito", aseveró.

Por su parte, los otros dos ponentes se centraron en la fórmula del 85-15, establecida en 1996 por la Ley del IRPF, que recoge que el 85% del salario procedente de los clubes era percibido por rendimiento deportivo, mientras que el 15 restante podía ser cobrado a través de sociedades de derechos de imagen. Sin embargo, la Agencia tributaria cuestiona la mayoría de estas sociedades y las tacha de "ficticias", de ahí los numerosos problemas de algunos deportistas.

"El problema era tan grande que articulamos el 85-15 como solución. Era elevar a la categoría de norma una ficción. Se crea porque los deportistas merecen un régimen especial al ganar mucho dinero durante un período corto de tiempo", subrayó Clara Jiménez.

"Estamos ahora mismo en una situación donde el 85-15 es un producto de alto riesgo", explicó el profesor Palomar. Para él, el 85-15 es "lo que les queda" a los deportistas, y ese 15 por ciento "es el punto de discusión".

El profesor defendió la mutualidad de los deportistas, donde iban a parar gran parte de sus ingresos, aunque los podían recuperar a modo de pensión al año siguiente de terminar su vida deportiva con una retención del 40%, y explicó que el Decreto Ley 5/2015 "ha hecho al fútbol solidario con todo lo que se mueve" en referencia a que con "el dinero del fútbol profesional se paga el fútbol femenino, el regional, la Seguridad Social de los esquiadores, los sindicatos, por ejemplo".

Del mismo modo, recordó que el fútbol tiene "una solidaridad impuesta por el Gobierno", ya que, por ejemplo, los clubes han perdido "un dinero de las quinielas que este año no tienen para pagar los Juegos del Mediterráneo". Por tanto, ante esta "circunstancia compleja", Palomar abogó por "volver a sentar el sector con su realidad fiscal", ya que actualmente "cada norma que dicta el Estado al fútbol le cuesta algo".