El EDP Rock 'N' Roll Madrid Maratón cumple 40 años este domingo combinando música y deporte

El maratón estrena en esta edición el máximo galardón que otorga la Federación Internacional de Asociaciones de Atletismo (IAAF), la Etiqueta de Oro, que reconoce "no solo la calidad del recorrido", sino "el trabajo de la organización y las facilidades dispuestas a los corredores", ha informado la organización del maratón.

La carrera dispone de tres distancias según la preferencia del participante: el maratón, con 42.195 metros; medio maratón, de 21.097 metros; y un recorrido de 10 kilómetros.

El EDP Rock 'N' Roll Madrid Maratón busca "las mejores prestaciones" para los más de 37.000 corredores de sus distintas categorías, así como de los asistentes que disfrutan del deporte y de la música en directo. Del total hay 10.179 participantes internacionales, "muestra del atractivo que este maratón ofrece".

DESFIBRILADORES EN EL RECORRIDO

Así, para cuidar también del corazón de deportistas y espectadores, la organización cuenta con diez dispositivos del Desfibrilador Operacional Conectado (DOC), patentado por B+Safe y cedidos gratuitamente a través de su 'Proyecto+Vida'.

Estos dispositivos de cardioprotección permiten una rápida respuesta ante paradas cardiacas, ya que cuentan con geolocalización y tele-asistencia, y se suman al equipo médico dispuesto por la organización.

Los desfibriladores estarán distribuidos en distintos puntos para cubrir adecuadamente los exigentes 42.195 metros que componen la prueba. De esta manera, la presencia de cuatro patinadores con los DOC permite reducir los plazos de intervención ante una incidencia cardiaca.

"Las carreras de maratón suponen un riesgo potencial que los organizadores debemos aminorar implementando medidas de prevención o de actuación inmediata", ha destacado el director de los Servicios Asistenciales del EDP Rock 'N' Roll Madrid Maratón, José Antonio Martín.

Por su parte, el director general de B+Safe, Nuño Azcona, ha subrayado que haber recibido la Etiqueta de Oro de la IAAF demuestra que la organización se preocupa "por todos los destalles de la carrera" y da "un extra de seguridad a los corredores y a la propia organización".