Pablo Carrera: "Las medallas vienen con un poco de ayuda"

El tirador vasco lamenta el recorte de las subvenciones y el cierre de muchos campos de tiro en España

El tirador Pablo Carrera, diploma olímpico en Londres 2012 en pistola de aire 10 metros, lamentó este domingo el recorte de subvenciones que están sufriendo en los últimos cuatro años, el cambio de reglamentación y el cierre de muchos campos de tiro en España, lo que provocará que las medallas en campeonatos de Europa y del Mundo y Juegos Olímpicos vayan a costar, según él, "un poco más".

Pablo Carrera no pudo entrar esta mañana en la final de pistola de 50 metros, pero su cara no reflejaba decepción en una carpa temporal junto a la Royal Artillery Barracks, bajo la que la eterna lluvia londinense sorprendía a voluntarios, oficiales y tiradores, pero que no trajo consigo ese torrente de medallas que parecía que iba a producir para España el tiro olímpico.

"En el equipo no hay decepción porque, con dos diplomas, un quinto y un sexto hemos mejorado el resultado de Pekín. Es verdad que la gente quería medallas porque veníamos dos campeones de Europa y del mundo, pero esto nunca es garantía en este deporte", manifestó en declaraciones a Europa Press.

Carrera quedó, con 554 puntos, en el puesto 22 de 38 participantes, lejos de los ocho primeros que disputarán en unas horas la final. "No siempre puedes estar a un alto nivel en este deporte en el que todo puede fluctuar un poco a la hora de competir bien. La única diferencia del otro día a hoy es simplemente es que no he podido sacar los diez. Tenía muchos nueves pegados, muchos ochos pegados, pero no dieces. Iba bajando las puntuaciones y al final remontar eso es muy difícil", explicó.

Empezó en el tiro a los 17 porque vio a un tirador en los Juegos de Atenas y dijo: 'yo quiero ser como él e ir a unos Juegos'. El sueño de Londres 2012, para los que se ha "preparado bien", lo ha cumplido ahora con 26 años. Confiesa que le falta experiencia y que su generación alcanzará el momento cumbre en 2020, el año en que quiere organizar los Juegos Madrid. "Los resultados han sido bastante buenos. Ganar el Campeonato de Europa y entrar en la final de la Olimpiada para cualquier deportista que lleve el tiempo que llevo yo no es fácil", apuntó.

Dice que no ha sentido más presión por las esperanzas puestas en el tiro por la delegación española en la capital británica. "La exigencia es la misma, la que te planteas a ti mismo", apuntó. Y puso como ejemplo al campeón del mundo en pistola libre, el japonés Tomoyuki Matsuda, que no se ha clasificado para ninguna de las dos finales. "¿Eso qué significa? Pues que, aunque es un buen tirador, ahora no ha podido dar todo su potencial. En este deporte somos muchos tiradores de mucha categoría que fluctuamos en diez puntos. Si hacemos la competición mañana los que entran en la final no son los mismos", aseguró.

"NO HAY DINERO".

El pupilo de Cezary Staniszewski dijo que el tiro no es una fórmula matemática, como los 100 metros, en los un corredor "sabe que los hace en tanto coma tanto". "Aquí no. Sabes que estás en un rango de puntos y, si nadie los supera, sabes que vas a estar en la final. En este deporte no tenemos apoyo, nos están quitando los campos de tiro y no hay dinero para hacer todo lo que quisiéramos. Cada año nos bajan las aportaciones a la Federación, este último año un 25 por ciento", subrayó.

Así, el tirador de Bilbao reivindicó que las "medallas vienen con un poco de ayuda". "Ya sabemos que son tiempos difíciles para todos, pero, si en los últimos cuatro años nos están bajando todas las aportaciones económicas y cerrando muchos campos de tiro en España por los cambios de normativa, nos va a costar más", manifestó.

No obstante, no pierde las esperanzas de lograr una medalla todavía en trap, especialmente Jesús Serrano, que "es un tirador muy bueno". "No es campeón del mundo como Alberto, pero se encuentra bien. Los dos están muy bien preparados, como todo el equipo, nos falta experiencia eso es verdad, pero nos hemos clasificado, por vez primera, ocho tiradores para unos Juegos. Estamos contentos con lo que hemos hecho en los últimos cuatro años, aunque aquí no se ha dado lo que la gente pensaba que se iba a dar", admitió.