El abogado de Karabatic, que sigue detenido, dice que "apostaron", pero que "no se "dejaron ganar

Los dos jugadores franceses están entre los acusados por un presunto caso de amaños de partidos en la Liga francesa, entre ellos el del Montpellier, su equipo, y el Cesson-Sevigne, que se decantó del lado de este por 31-28 cuando el primero ya se había proclamado campeón.

"Ellos apostaron, pero no se dejaron ganar. Esto es una infracción deportiva, no una infracción penal. Para que la justicia pueda intervenir en esta caso, hace falta un partido amañado, y sobre el plan penal no hay nada", señaló Eric Dupond-Moretti en la 'RTL' francesa.

Además, el abogado aseveró que es el fiscal "el que debe demostrar" si se amañó el encuentro. "Estos hombres desmienten haber amañado este partido, no son tramposos, el partido no fue amañado", sentenció.

Según informa 'lequipe.fr', Nikola Karabatic, detenido junto a una decena de personas, podría permanecer en custodia policial hasta el martes, aunque Dupond-Moretti cree que esta medida "no es útil". Los investigadores están intentando demostrar si, además de las apuestas, ilegales en el caso de deportistas, el choque fue amañado, lo que puede variar el castigo impuesto a los acusados. Si hay delito penal, los implicados se arriesgarían a cinco años de cárcel, mientras que si fuese un delito deportivo, podría ser castigados con seis partidos de suspensión.

Los dos hermanos estuvieron presentes el pasado jueves en el estreno del Montpellier en la Liga de Campeones ante el Flensburg (37-37) y también en la abultada derrota liguera ante el PSG (38-24), y posteriormente fueron trasladados a las dependencias policiales para ser interrogados.