El preso Antonio García-Vidriel, que cumplía condena en Tánger (Marruecos) por tráfico de drogas, ya está en España para terminar de cumplir su pena. García-Vidriel fue detenido en Marruecos el 13 de abril de 2012 junto a su hijo en un camión en el que fueron descubiertos 8,9 toneladas de hachís ocultas en sandías y debe cumplir una condena de cuatro años que finaliza el 13 de abril de 2016.