‘El programa de Verano’ ha podido hablar con unos vecinos de la pareja que compraron supuestamente un bebé por 100.000 euros a una mujer de nacionalidad rusa. “Ese niño estaba siendo maltratado, un día a las 3 de la madrugada se escuchó un golpe muy fuerte y el hombre empezó a chillar, y al rato el niño empezó a llorar de dolor”, han contado. Además, han dicho que no llamaron a los servicios sociales porque vimos que “ya estaban sobre el asunto y por miedo a represalias”.