Felices y sonrientes. Así se han mostrado Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa en su primera entrevista juntos. Los gestos de cariño han sido constantes durante la sesión de fotos, que se ha realizado en el impresionante mosaico que la fábrica de la que es imagen Isabel posee en Castellón y que reproduce el edificio de la marca en Nueva York.