Al PP nunca le ha gustado la palabra independiencia y siempre se ha opuesto firmemente. "Si gobierna con ellos, malo. Muy malo para España", decía Mariano Rajoy hace unos meses. Sin embargo, ahora que les toca a ellos pactar, el PP parece haber cambiado radicalmente su postura y ha pasado al entendimiento y al diálogo.