'AR' tiene acceso a la declaración de la joven violada en San Fermín

7 de julio. Arranca San Fermín en Pamplona. Miles de personas disfrutan de la fiesta. Entre ellos un grupo de cinco jóvenes sevillanos. De madrugada se encuentran con una joven madrileña de 19 años. "Me encontré con amigos de la Universidad pero los perdí. Me senté en un banco. Hablé con un chico y me presentó a sus amigos. Yo había bebido pero me encontraba en buenas condiciones. Me preguntaron cómo me llamaba, de dónde era. Les dije que me marchaba al coche a dormir y se ofrecieron a acompañarme. Intentaron entrar en un hotel pero el portero no se lo permitió", dice la joven al juez. Tras esto, el grupo se envalentonó y se produjo la violación. "Para entrar en el portal dos chicos se quedaron conmigo mientras los demás se acercaron a otra chica que abrió el portal. Uno de los chicos sujetaba la puerta abierta. Me tiraron al suelo. Me quitaron el sujetador y me taparon la boca. No podía gritar. Recuerdo que uno de ellos decía: "Quillo, me toca a mí. No sabía quien hacía cada cosa", le relata la joven al juez. Tras la violación, la joven denuncia la agresión. "Recuerdo que uno de ellos llevaba un tatuaje y otro un gorro. Los chicos se fueron corriendo del lugar. Yo tardé cinco minutos en salir del portal. Me levanté del suelo, me puse bien la ropa y me senté en un banco a llorar. Le conté a una pareja que pasaba lo ocurrido y llamaron a la policía. Si volviera a ver a estos chicos los reconocería".