Gala 21: Todo menos cursi

Hoy esto va de una entrevista, dice MM, pero lo dice porque todavía no sabe que en el gallinero de exconcursantes hay más indignados que en Sol, ni sabe que Noemí va a pasar de Narnia a Guadalix en vuelo sin escalas.

En realidad, la gala ha salido a base de fogonazos.

Después del vestido de MM, el primer fogonazo estalla en el gallinero de exconcursantes. Verónica está considerando encadenarse a los barrotes de Telecinco porque ha visto un vídeo en el que Alessandro le dice a Dani que MM le recomendó que pensase en qué exconcursante tendría "más apoyo" antes de elegir acompañante. Esto le parece una injusticia. Tiene el vídeo en el móvil, por si viene la policía de la moral.

Cristian está a punto de irse a lavar al río en señal de protesta porque MM le ha dejado de machista y, en 45 días que lleva en la calle, nadie le ha puesto un vídeo demostrativo, y el zagal tiene muchas ganas de que le pongan un vídeo demostrativo, a ver por qué todo el mundo se ha dado cuenta de que es un machista menos él.

Hombre ya.

No se sabe muy bien cómo, en 45 días ha pasado del discurso soy-machista-¿y-qué?, al discurso no-soy-machista-en-absoluto. Sin embargo, sigue utilizando el sarcasmo con más voluntad que ingenio, y en su tono agresivo siempre hay ganas de raspar personalmente al enemigo.

Saltamos a la pecera. Pepe es el tercer finalista. Tiene que elegir a un acompañante para la final. Noemí se pone de pie y aplaude a Pepe. Luego hace el gesto internacional de "teléfono", extendiendo el pulgar y el meñique, gesto adoptado por los surfistas del mundo entero por motivos incomprensibles.

Pepe no sabe qué está pasando fuera, ni dónde le van a llevar después.

El público grita: "¡Noemí, Noemí!" y no sé por qué me viene a la cabeza aquel viejuco de 'La vida de Brian' gritando: "¡Jehová, Jehová!", justo antes de que le lapiden.

La familia pronuncia NO-E-MI de forma que Pepe pueda leerles los labios desde lejos. El amigo-defensor de Pepe, sentado detrás de Noemí en el gallinero, trata de señalar disimuladamente a la pardala con la cabeza, pero disimula regular, y termina meneándose adelante y atrás en el asiento, estirando el cuello como un león marino.

Pepe elige a Noemí.

¿Qué iba a hacer?

Ya tenemos al tipo del hacha.

Saltamos a la primera parte de la gala. En el resumen de la semana hay más amor que en 'La casa de la pradera'. Así que nos apañamos con un par de vídeos nuevos, con un refrito de la gala pasada y con la resolución de la prueba semanal, basada en un programa de aerobic llamado Zumba Fitness que practican ya más de 12 millones de personas en todo el mundo, y todos tienen el culo que parten nueces.

Saltamos a regalar guri-guris.

Saltamos a regalar el libro de Gilda Santana, que se está vendiendo como rosquillas, dice MM, aunque eso de que las rosquillas se vendan tanto es una leyenda urbana.

Saltamos a regalar CDs con la música del programa.

Saltamos a la actuación promocional, en directo, dentro de la casa, de un cantante reguetonero. ¿Por qué reguetonero? Porque si sale un muchacho tirando a feete, cantando una letra que venga a decir: ven pa'cá, que te voy a dar con todo lo tuyo, mientras le rodean 15 pibones enfebrecidos y medio en pelotas, pero el zagal ni se inmuta, es reguetón, fijo.

Volvemos a la pecera. "No nos has dejado ver el alma de Pepe Flores", dice MM. Dice: "No te has dejado arañar el corazón".

GH es de todo menos cursi, decía la semana pasada, la muy sinvergüenza.

Y lo dice porque si no te entregas con refocilo al porno emocional es que eres de cartón piedra. Que no lloras, que no te dejas ir, que no te enamoras de las pardalas. Pero todo movimiento nos delata, decía Montaigne. Todo lo que hacemos es un autorretrato. Y más en situaciones de presión, he intentado explicar alguna vez. La misma resistencia de Pepe a desvelarse es lo que le desvela. Y se resiste en la misma medida brutal en que valora lo que trata de esconder, hasta el punto de configurar su carácter absolutamente.

Saltamos al resumen de la semana. Dani ahora cree que Mary Joy le miraba con ojos golosones durante la entrevista. Ariadna le dice que se olvide, que Mary Joy no le toca ni con el palo de una escoba.

Minipunto.

Le dice que, si gana los 300.000 euros, a lo mejor tiene una oportunidad.

MM pregunta. Mary Joy dice: "no sé si 300.000 euros harán mucho...".

El realizador pincha la risa grabada de Dani porque sabe que el dinero (o la fama) es una forma de jerarquizar la sexualidad.

Véase el caso del reguetonero feete y los 15 pibones enfebrecidos.

En el siguiente flash, vídeo antológico sobre las ges y las jotas. Pepe, talludito ya para descubrir las incoherencias de la ortografía castellana, se pregunta por qué unas palabras van con ge y otras con jota, si son palabras muy parecidas.

-¿Por qué va 'mensaje' con ge, si 'sabotaje' va con jota?

-Porque mensaje no va con ge -dice Hugo.

-Ah ¿Y con qué va jirafa? -dice Pepe.

-Con ge de jamón -dice Sindia-. ¿No?

A Hugo le da la risa.

-Con jota -corrige.

-¿Entonces, por qué 'gitana' va con ge y 'jirafa' va con jota? -dice Pepe.

Hugo no lo sabe.

-¿Y jipi con que va? -dice Sindia.

Hugo se parte por el medio.

-Con hache -dice, cuando se repone-. Es una palabra inglesa.

-Te las sabes todas -dice Pepe.

-Es que mi madre es profesora de Latín -dice Hugo.

-Eso está muy bien. Con el Latín se va a cualquier sitio -dice Pepe.

Minipunto.

Pepe es el único que me hace reír.

Alessandro es el único al que prestaría dinero.

Para el siguiente fogonazo, volvemos a la sala de expulsión. Pepe y Sindia están de pie, llevan un rato abrazados y Pepe tiene que subirse a la furgoneta. Da un paso atrás, se pasa la mano por el pelo, levanta la cabeza y mira fijamente a Sindia. Intenta sonreír, pero sólo consigue estirar la comisura de los labios y la sonrisa se le queda colgando en la cara, como un ratón muerto en la boca de un gato. Aguanta en silencio sin apartar la vista de Sindia. Cinco segundos. El ratón colgando.

Cinco segundos duran más de lo que parece.

Implícito, o sea, emocionante.

Eso sí, si no gimoteas, no se te ve el alma.

Otra vez en la pecera. Sergio y Cristian han tenido un careo con Pepe, pero cuando le toca a Fray Bultaco, se niega a subir a la pecera.

Es el tercer indignado de la noche.

MM sostiene que ha sido una cobardía, que "no se ha atrevido". Fray Bultaco sostiene que de eso nada, que él: "no ha querido". MM tira por el doble lenguaje de la Santa Iglesia, así, en general, a pesar de que "querer" y "atrever" sean dos palabras distintas, señal habitual de que significan cosas diferentes, y el doble lenguaje es cuando lo mismo significa cosas distintas.

Así que sale al corte Michael para decir que "hay que respetar las opiniones de los demás", porque lo ha leído en un posavasos.

A las opiniones hay que maltratarlas, empezando por las propias.

Michael concluye: "Juan no ha subido y punto".

MM rectifica y le da la razón a Michael.

Minipunto.

Saltamos al presente. En el presente no sé cómo terminar la crónica, así que, mientras decido que después de tanto salto, voy a terminar en el presente, me quedo trabao viendo a Noemí y Alessandro en el 24 horas.

En el salón están todos menos Noemí. Se conoce que ha ido al confesionario a por un par de Porunoidomentrazepam 50 mg.

Pepe aprovecha la ausencia para aclarar por qué ha elegido de acompañante al tipo del hacha. Dice: "no me arrepiento porque sé por qué lo he hecho". Dice: "Tengo mis razones pero no puedo decirlo".

O sea: no puede decir que su razón es su amigo haciendo el león marino.

Su familia pronunciando NO-E-MI

El público gritando Jehová.

La libreta del exminutante. Mientras pongo las negritas, vuelve Noemí. Se sienta en el borde del sofá, junto a Alessandro, sin mirarle. Menea la pierna.

Al rato, le devuelve una pulsera.

Alessandro sonríe. Coge la pulsera y se la pone.

Se ha comportado de forma impecable toda la noche.

Sus oblicuos no me llaman la atención, pero me va ganando poco a poco.

Andad por lo segao.