Alyson Eckmann pide ayuda para salvar la vida de uno de sus mejores amigos

El 4 de mayo, Cristian, conocer las playas y surfear. Después de varios días por distintos lugares de Indonesia, llegó a Bali. Pocos días más tarde, el 18 de junio, comenzó su calvario. Sufrió una fuerte hemorragia de nariz y tuvo que acudir al hospital. Después de varias pruebas y análisis de sangre, le diagnosticaron Leucemia Linfoblástica aguda, un tipo de cáncer de sangre y medula osea que anula el sistema inmune de quien la padece y produce inflamaciones agudas en orgános vitales.

Aquí comienza una lucha, tanto suya como del equipo médico que le trata, para poder controlar esta grave enfermedad. Se le practican transfusiones de sangre continuas como medida paliativa. Sin embargo, conseguir donantes en aquel país resulta muy complicado. El estado de Cristian es crítico. Necesita urgentemente un trasplante de médula. Los médicos dicen que hay que actuar en la mayor brevedad posible. Se trata de una enfermedad que avanza muy rápidamente en cuestión de días.

Para su correcto tratamiento y trasplante de médula, necesita una ambulancia aérea, un avión medicalizado para poder llegar a España, al Hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander.

Cristian contrató un seguro para su viaje (Trawick International & GBG Insurance) Sin embargo, el seguro no quiere cubre las condiciones de traslado necesarias para garantizar su seguridad. Cada minuto cuenta para Cristian. Cada día que pasa, es más difícil mantenerlo estable y con vida.

Ya que cuenta con la doble nacionalidad Mejicana y Española, familiares y amigos desplazados allí han intentado acudir a los respectivos consulados, pero hasta el momento no les han dado ninguna solución. La maquinaria de la burocracia es lenta y larga, pero Cristian no puede permitirse ese lujo, ya que el tiempo es vital para él.

Han contactado con varias empresas aéreas especializadas para realizar su traslado el precio asciende a 115.000€. Ante semejante coste, su prima Carolina Fernández y su amigo Justin Lindholm ha puesto en marcha la recaudación de este dinero por medio de la plataforma donadora y gofundme.