La Sareb podría quedarse con el mayor rascacielos de Benidorm

El coloso Intempo nació para ser el rascacielos residencial más alto de Europa pero nunca ha estado habitado. Sus cristales dorados y este cono invertido que recuerda a un diamante han ido perdiendo lustre y su abandono es uno de los grandes símbolos de nuestra crisis inmobiliaria.

Ahora un juez decide el futuro del un miembro destacado de la silueta de Benidorm. Varios fondos de inversión están pujando para hacerse con él pero por ahora ninguna oferta alcanza el precio de tasación: unos 90 millones de euros.

Las inmobiliarias de la zona echan cuentas porque desde que fue construído el precio del metro cuadrado en la zona ha perdido la mitad de su valor.

Desde que la promotora quebró en 2013 dejando una deuda de más de 100 millones de euros, la Sareb, conocida como el banco malo, es su acreedor principal. Y si ninguna oferta convence al juez, podría quedarse con el edificio definitivamente.