'El alcalde de Zalamea' reabre las puertas del Teatro de la Comedia con una versión "brutal y masiva"

La obra de Calderón de la Barca 'El alcalde de Zalamea' abrirá de nuevo el próximo viernes 16 de octubre las puertas del Teatro de la Comedia 14 años después de su cierre, con un reparto encabezado por Carmelo Gómez y una versión "brutal y masiva", en palabras de su autor Álvaro Tato.

Bajo la dirección de Helena Pimenta, responsable de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, esta obra conserva los "tres temas fundamentales" de la obra original (el amor, el honor y la justicia) en torno don Pedro Crespo (Carmelo Gómez) y su hija Isabel (Nuria Gallardo).

"Pero está constantemente relacionado con otros temas y el honor hace alusión a muchos de ellos. En especial el honor como dignidad personal, un derecho fundamental que ha sido la lucha de todos los tiempos, ya que todavía ahora sigue habiendo abuso del más fuerte con el más débil", ha asegurado Pimenta.

Precisamente, uno de los elementos claves es el del momento de la violación de Isabel por parte de Don Álvaro de Ataide (Jesús Noguero) que la propia Pimenta ha reconocido que le ha "roto como mujer". "Esta vez he estado especialmente emocionada, como mujer ver eso...es un texto que me ha ido atravesando las células", ha apuntado.

Para Carmelo Gómez también supondrá un regreso a un teatro en el que recitó versos por primera vez. "Me trae muchos recuerdos porque con 'El caballero de Olmedo' porque era la primera vez que recitaba, no sabía ni cómo se decía aquello y me desbordó. Ahora tengo más dominio de las emociones, pero no sé si es mejor", ha bromeado.

El actor ha alabado el texto de Calderón, alguien que "sabía que estaba en una época de transición y cambio" que podría compararse con la actualidad. "Ahora vemos que en España y en Europa se está buscando a esos hombres capaces de defenderse a sí mismo y a la colectividad. Esa gente se puede encontrar en los pueblos, yo la conozco, pero en la ciudad lo veo más difícil", ha aseverado.

En esa misma línea de contemporaneidad, otro de los actores del reparto, Joaquín Notario (aquí Don Lope de Figueroa y que ya participó en una anterior versión de 'El alcalde de Zalamea' como Pedro Crespo), ha defendido el trabajo del autor del Siglo de Oro español.

"Juega con las épocas, habla de unos tiempos renacentistas y los manda al barroco, lo que hace la obra eterna debido a su atemporalidad. Además, es un muestrario perfecto de la sociedad de su tiempo, con unos militares que no son ya sino auténticos rapiñeros", ha indicado.

"¿ABURRIDO Y SERIO EL ARTE?"

Tato ha resaltado que en esta versión ha tomado "pequeñas decisiones" sobre el texto y "algunos movimientos" en los versos para que los espectadores "sientan igual que lo hacían en el siglo XVIII". En esta misma línea, ha defendido la vigencia de textos de otras épocas.

"¿Aburrido y serio el arte? Eso es una caspa que hemos heredado y todavía hay alguna gente que entra horrorizada al teatro. Con los clásicos hay que tener respeto pero no reverencia", ha señalado. Notario ha añadido que esa falta de interés por obras clásicas responde a "un problema de colegio", reiterando que "lo clásico es lo más nuevo" que conoce.

Respecto a la música, se alternará un sonido barroco con otros temas más "mediterráneos" y música popular, mientras que la puesta en escena contará con "un único espacio muy sencillo" que recordará a un auto sacramental y está inspirado en la pintura matérica. "Extremadura ahora es más húmeda pero tuvo épocas muy duras. Hemos analizado muchos escenarios y músicas y todo obedece a un plan común", ha afirmado.

REAPERTURA DEL TEATRO DE LA COMEDIA

El Teatro de la Comedia de Madrid reabrirá de esta manera sus puertas tras 14 años cerrado. Inaugurado en 1875 y después del cierre, la obra de rehabilitación comenzó en septiembre de 2010, finalizando el proyecto el pasado 14 de julio.

Pimenta ha confirmado que las previsiones apuntan a que el 30 de septiembre de 2017 se complete la infraestructura escénica y equipación. Mientras, la dotación técnica actual servirá para los próximos dos años, aunque "el teatro ya esté listo para recibir al público".

"Todavía no podíamos contar con toda la equipación técnica, pero pensábamos que merecía la pena abrirlo ya porque, si se sigue esperando, no se abre y abría que esperar otros tantos años", ha concluido.