Abierta la convocatoria para la dirección del Museu Picasso de Barcelona

Las bases marcan que la nueva dirección tiene que acentuar la especificidad del museo con un discurso propio; fomentar la construcción de nuevas narrativas; reforzar el trabajo en red con otros centros; favorecer las nuevas adquisiciones y donaciones; reforzar el programa pedagógico, y convertir el centro en un museo abierto al barrio.

En el proceso de selección se valorarán de forma especial el conocimiento del mundo de Pablo Picasso, una trayectoria profesional que demuestre su conocimiento sobre el pintor malagueño y del entorno del artista.

En cuanto a experiencia de dirección, las bases requieren que la candidata tenga capacidad de coordinación de equipos y habilidades de liderazgo relevantes, elevado grado de capacidad de comunicación, capacidad de vincular el mundo del arte con otras disciplinas y una visión clara de cuál debe ser el posicionamiento de la Fundació Museu Picasso.

Los candidatos tienen que presentar su currículum y un anteproyecto que incluya su visión sobre la misión del museo, las políticas de conservación y difusión del centro, el programa de exposiciones y actividades temporales que ofrezcan nuevas miradas, el programa pedagógico y el proyecto de colaboración en redes a nivel local, nacional e internacional.

CINCO AÑOS PRORROGABLES

Sobre el contrato del director, que finaliza en junio, el patronato del museo ha trabajado hasta ahora en el redactado del concurso para ocupar la plaza a partir de julio y por cinco años prorrogables, explicó la comisionada de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona, Berta Sureda, en la presentación de temporada del museo en enero.

"No se cuestiona su trabajo. Simplemente, tenemos un informe de los servicios jurídicos para que cualquier renovación se haga por concurso público", subrayó la comisariada, ante lo que el director señaló que todavía no había decidido si se presentará o no.

De todas formas, ha evidenciado que el trabajo de director de museo es imposible de hacer en apenas cuatro años, algo que también suscribió Sureda, anteriormente vinculada al Museo Reina Sofía, en Madrid.