ACS e Iberdrola se citan ante el juez en Madrid para otra vista previa

Iberdrola había solicitado el pasado mes de junio al Juzgado de lo Mercantil número 1 de Madrid que impugnase las cuentas de ACS, que también es su principal accionista, al considerar que la constructora tuvo en 2009 unas pérdidas brutas ordinarias de 405 millones de euros, en lugar del beneficio de 988 millones de euros declarado por el grupo.

Sin embargo, el juez rechazó la solicitud de la eléctrica de incluir cautelarmente la demanda de impugnación de las cuentas de la compañía que preside Florentino Pérez en el Registro Mercantil de Madrid.

El tribunal desestimó íntegramente esta petición, ya que a su juicio "no concurren" los requisitos esenciales previstos en la Ley, y que, para solicitar la tutela cautelar, "no basta con recurrir a argumentaciones genéricas como la simple garantía de terceros".

La vista previa del martes se celebra poco más de un mes después de que ambas empresas hayan puesto ya fecha a la otra batalla de su guerra judicial, la que se espera que tenga lugar ante el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao el 18 de enero del próximo 2011.

En este juicio, ACS pedirá que se anulen los acuerdos adoptados en la Junta General de accionistas de Iberdrola que se celebró el pasado 26 de marzo, en la que la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán negó la entrada de un representante de la constructora en su Consejo de Administración.

Dicha junta había aceptado inicialmente la petición de ACS, que alegaba su derecho a contar con un consejero en Iberdrola en ejercicio de la representación proporcional, ya que posee el 12% de la eléctrica entre participaciones directas e indirectas.

Poco después, un accionista de Iberdrola solicitó el "cese" inmediato del consejero, apelando a la existencia de un conflicto de intereses entre las dos empresas, que competirían en sectores como el de la ingeniería o el de las energías renovables.

Acto seguido, la junta acordó reducir de 15 a 14 el número máximo de consejeros de la eléctrica.

El tribunal bilbaíno también rechazó las medidas cautelares solicitadas por ACS para impugnar la junta de Iberdrola, puesto que, en su auto resolutorio, el juez consideró que, por los informes presentados por Iberdrola, "al menos indiciariamente parece que existe un conflicto económico de gran entidad" entre ambas empresas.