(Ampliación) Ono sufre incidencias en sus servicios que afectan a sus clientes de móvil

Así, los clientes empezaron a registrar las primeras caídas en su servicio de móvil entre las 17.00 horas y las 18.00 horas de la tarde y sobre las 22.00 horas se solventó la incidencia en toda la red de cobertura de Ono.

Las fuentes han señalado que la incidencia, que afectó en un primer lugar a los servicios de voz móvil del operador y supuso, aunque en menor medida, algunas caídas también en los servicios de datos móviles, se debió a un problema en la red de Ono, que quedó finalmente subsanado.

En este sentido, fuentes de Telefónica consultadas por Europa Press ya habían señalado anteriormente que la incidencia era ajena a su infraestructura. Ono, que alquila la red de móvil de Telefónica desde 2007 y alcanzó el pasado año un acuerdo con esta compañía para prorrogar el contrato de Operador Móvil Virtual (OMV), tenía a cierre del pasado año 1,08 millones de clientes y es de las operadoras vencedoras en portabilidad móvil mes a mes.

Vodafone anunció el pasado mes de marzo la compra de Ono por un precio de 7.200 millones de euros, incluyendo una deuda de 3.341 millones de euros. La operación está pendiente de la aprobación de los organismos reguladores.

Los clientes de Jazztel sufrieron un apagón en sus servicios de móvil el pasado 12 de marzo desde las 12.36 horas y el servició no se restableció totalmente hasta 00.00 horas, en el caso de la voz, y hasta las 2.00 horas de la madrugada del día siguiente en el caso de los datos. La compañía presidida por Leopoldo Fernández Pujals comunicó entonces que compensaría de "forma automática" a toda su base de clientes de móvil, que actualmente supera los 1,16 millones, con cinco euros por usuario, lo que le supondría un importe total de más de 6 millones de euros.

Por su parte, FACUA-Consumidores en Acción informó que ha pedido a Ono que abone una compensación económica a todos sus clientes sin necesidad de que estos tengan que presentar reclamaciones. La asociación recordó que la legislación del sector establece cuantías "absolutamente ridículas" para compensar los perjuicios provocados a los usuarios por estos apagones, por lo que lleva años demandando una modificación sustancial de la norma.