Caen las matriculaciones de coches un 41,6 por ciento en enero

El año comienza con el segundo peor mes de enero de la historia, solo superado por el del año 1993, cuyo descenso fue del 53%. Los fabricantes automovilísticos adelantaron la semana pasada una predicción de cierre para este año de unas 900.000 unidades, un 23% menos que en 2008.

El 2009 se preveía un año difícil para el sector, pero las cifras, hechas públicas este lunes, auguran que será peor de lo previsto. En 2008, las ventas de coches cayeron un 28,1% frente a 2007 y los últimos datos sobre la producción indican que ésta bajó en noviembre casi un 40% frente al mismo mes del año anterior.

Por segmentos, los turismos matricularon 53.867 unidades, un 43% menos que en el mismo mes del año pasado (94.506), mientras que los todoterrenos, con 5.518 matriculaciones, atenuan algo su caída de meses atrás, y en enero arrojan un 22,4%, frente a los registros superiores al 50% de hace unos meses.

Las estadísticas dan una idea de la coyuntura del mercado, pues a los 450.000 coches de menos que se matricularon en 2008, se añade un comienzo de año con 42.000 matriculaciones menos en los segmentos que representan tres de cada cuatro ventas automovilísticas en España.

Por canales de ventas, se apunta que los particulares (en los que Anfac y Ganvam incluyen las flotas de empresas) han reducido las compras automovilísticas en enero un 39,7%, mientras que las compras de empresas del alquiler, en un mes de temporada turística baja, se reducen hasta el 58,1%.

Las ventajas fiscales, insuficientes

El Congreso de los Diputados aprobó en noviembre una serie de beneficios fiscales para las empresas que asistieran al Salón del Automóvil de Barcelona.

En concreto, estas ventajas consisten en una deducción del 15% en el Impuesto de Sociedades de los gastos en publicidad para las promociones del Salón y de los gastos e inversiones en construcciones.

Sin embargo, las asociaciones Anfac y Ganvam aluden a la "gravedad de la situación económica y financiera" como la causa y el efecto de este comportamiento de las ventas de automóviles, por lo que tiene de creación de un ambiente de inseguridad y desconfianza entre los consumidores.

Por ello, reclaman de la Administración retornar a medidas de estímulo con ayudas directas, en la línea del extinto Plan Prever, tal como han arbitrado países del entorno, como Alemania, con 2.500 euros, y Francia, con 1.000 euros, además de Austria, Portugal e Italia.ZA