HRW denuncia la muerte de 75 civiles en bombardeos "indiscriminados" del Ejército de Irak

En su informe, la organización ha documentado un total de 17 bombardeos contra zonas civiles desde el 6 de junio, la mayoría de ellos en la primera mitad de julio. El Ejército utilizó 'barriles bomba' en al menos seis de ellos.

HRW ha sostenido que la naturaleza indiscriminada de estos ataques viola el Derecho Internacional. "El Gobierno iraquí puede estar combatiendo una insurgencia violenta, pero eso no le da licencia para matar civiles en cualquier lugar en el que crea que el Estado Islámico se está escondiendo", ha dicho el subdirector de la organización para Oriente Próximo, Joe Stork.

La organización ha entrevistado a 30 testigos, víctimas, trabajadores médicos y familiares de las víctimas de los bombardeos en Faluya, Beiyi, Mosul, Tikrit y Al Sherqat. De las 75 muertes documentadas, 17 --incluidas siete mujeres y dos niños-- fueron provocadas por 'barriles bomba'.

"Existe una tendencia consistente de bombardeos en zonas residenciales con helicópteros, aviones y otras aeronaves. Los ataques fueron contra zonas en las que había mezquitas, edificios gubernamentales, hospitales y centrales eléctricas e hídricas", ha detallado.

Por ello, ha solicitado al Gobierno el fin "inmediato" de este tipo de ataques, al tiempo que ha subrayado que los gobiernos extranjeros que dan apoyo militar a Bagdad han de mantenerlo únicamente a condición de que el Ejército cumpla estrictamente con el Derecho Humanitario.

Varios de los entrevistados han dicho a HRW que los milicianos del Estado Islámico --antiguo Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS)-- se han desplegado en zonas civiles sin tomar medidas para evitar víctimas entre la población civil, tal y como requieren las leyes que rigen la guerra.