Heridas 34 personas en enfrentamientos entre universitarios y fuerzas de seguridad en varios puntos del país

En El Cairo, un policía ha resultado herido en una pierna tras recibir un disparo con una escopeta de perdigones en los enfrentamientos registrados en la universidad de Ain Shams, donde estudiantes seguidores de la organización islamista Hermanos Musulmanes se han manifestado contra el Gobierno.

Por otra parte, al menos 31 estudiantes han resultado heridos en el campus de la Universidad de Al Azhar en la ciudad de Assiut, tal y como ha indicado el Ministerio de Sanidad a través de un comunicado.

En el mismo, ha apuntado que otras dos personas han resultado heridas en la Universidad de Damanhur, ubicada en la gobernación de Beheira, en el delta del Nilo. Durante la jornada se han registrado además manifestaciones universitarias en Mansura y Alejandría, si bien se han saldado sin heridos.

Miles de estudiantes de Al Azhar y otras universidades se han manifestado en los últimos meses contra el Gobierno interino surgido tras el derrocamiento en julio del entonces presidente Mohamed Mursi y en respaldo a Hermanos Musulmanes, que ha sido designada por las autoridades interinas como "organización terrorista".

El golpe militar de julio de 2013 supuso el inicio de una persecución contra Hermanos Musulmanes. La semana pasada, un tribunal condenó a muerte a más de medio millar de islamistas por su responsabilidad en la muerte de un policía.

Asimismo, otro tribunal aplazó hasta el 28 de abril el juicio contra el guía supremo de Hermanos Musulmanes, Mohamed Badie, y otros 682 miembros de la formación por cargos que incluyen el asesinato. Por último, el fiscal general ordenó que otros 919 miembros del grupo sean juzgados por cargos que incluyen terrorismo y asesinato.

Las críticas por parte de diversas ONG internacionales contra el Ejecutivo interino por sus medidas represivas contra los manifestantes y los opositores y su decisión de catalogar a Hermanos Musulmanes como organización terrorista han sido constantes en los últimos meses.

Las fuerzas de seguridad han matado a miles de seguidores de la organización islamista y unos 400 militares y policías han muerto, muchos de ellos en ataques de milicianos islamistas en la península del Sinaí, que hace frontera con Israel y la Franja de Gaza.