Nunes se aparta para no perjudicar las investigaciones del Congreso sobre los vínculos con Rusia

Nunes se ha visto envuelto en la polémica después de asegurar el mes pasado que Trump y su equipo habían sido "vigilados" durante la fase de transición por los servicios de Inteligencia. La revelación unilateral de esta información y las reuniones mantenidas en la Casa Blanca han puesto en duda su labor.

Aunque considera que las acusaciones contra él son "totalmente falsa" y tienen "motivos políticos", Nunes ha explicado este jueves que cree que lo mejor para la Comisión de Inteligencia de la Cámara Baja y para el Congreso en su conjunto es que abandone "temporalmente" el cargo, hasta que concluya la investigación abierta sobre los posibles lazos entre Trump y Moscú.

Asimismo, Nunes ha solicitado hablar ante la Comisión de Ética en cuanto sea posible para aclarar las dudas que se ciernen sobre él, según un comunicado difundido por su oficina.

El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, ha reaccionado a esta dimisión temporal reiterando su "confianza" por el congresista y aplaudiendo su compromiso ético. En este sentido, ha dicho que apoya su decisión, con la que Nunes evita ser una "distracción" en las pesquisas pendientes.

Ryan confía en que el sucesor de Nunes al frente de la Comisión, Mike Conaway, "supervise una investigación profesional sobre las acciones de Rusia y siga las pruebas allá donde lleven".