Obama se compromete a cumplir con su responsabilidad de nombrar a un sucesor para Scalia "a su debido tiempo"

Scalia ha muerto este sábado, aparentemente por causas naturales, a los 79 años de edad en un 'resort' de lujo de Texas donde se encontraba. Su cargo, uno de los nueve jueces del Supremo, queda ahora libre y esto generará una dura batalla al presidente.

Tras conocerse su fallecimiento, republicanos y conservadores se han pronunciado sobre esta nueva situación en el Supremo. Por un lado, los conservadores esperan que no se elija al sustituto de Scalia hasta que haya un nuevo presidente, es decir, después de las elecciones del próximo 8 de noviembre, ante la esperanza de que sea un republicano el que llegue a la Casa Blanca.

Por el otro lado, los demócratas son proclives a que el actual presidente sea el que escoja al próximo juez del Supremo, órgano que se queda tras la muerte de Scalia con cuatro conservadores y cuatro liberales, por lo que la designación por parte de Obama podría inclinar la balanza de la Corte en favor de los demócratas.

En una rueda de prensa que ha mantenido poco después de conocerse la muerte del juez, el presidente ha recordado a Scalia, al que ha definido como una "mente legal brillante con un estilo agresivo, un ingenio incisivo y opiniones llenas de color".

"Influyó en una generación de jueces, abogados y estudiantes y dio forma de forma profunda al paisaje legal (...). Será recordado, sin lugar a dudas, como uno de los jueces e intelectuales más consecuentes que pasaron por el Tribunal Supremo", ha indicado el presidente.

Tras insistir en que es momento de pensar en la familia de Scalia, a la que trasladó sus condolencias y las de su esposa, Michelle Obama, Obama aseguró que su responsabilidad de nombrar al sustituto la cumplirá a su debido tiempo y afirmó que "hay mucho tiempo (...) para que el Senado cumpla con su responsabilidad de dar a esa persona una audiencia justa y una votación oportuna".

No obstante, no dio el nombre de ninguno de los posibles candidatos que podrían convertirse en el nuevo noveno juez del Tribunal Supremo de Estados Unidos.