Xi Jinping afirma que la decisión de Japón de comprar las islas Senkaku/Diaoyu es un "sinsentido"
Reuters/EP
19/09/201212:25 h."Japón debería controlar su comportamiento y evitar aquellas palabras y actos que atenten contra la soberanía y la integridad territorial de China", ha declarado Xi durante una reunión con el secretario de Defensa de Estados Unidos, Leon Panetta, según la agencia de noticias Xinhua.
Tanto China como Japón reclaman la soberanía de las Senkaku/Diaoyu, que no están habitadas pero se cree que están rodeadas por importantes reservas energéticas. La disputa se ha agravado en los últimos días, durante los cuales se han producido numerosas protestas en varias ciudades chinas y barcos de ambos países se han acosado mutuamente en el mar.
El gobernador de Tokio, Shintaro Ishihara, presentó un plan para que las autoridades metropolitanas comprasen las islas, lo que llevó al Gobierno japonés a anunciar el pasado 10 de septiembre, en un intento por solucionar la crisis, que las iba a comprar él.
Ishihara ha dicho en la Asamblea Metropolitana de Tokio que "si Japón cede ante China en este problema (...), se establecerá fácilmente la hegemonía china en las aguas de Asia".
SE AGRAVARÁN LAS DISPUTAS
Xi, que seguramente sucederá a Hu Jintao como líder del gobernante Partido Comunista de China este año, ha señalado que la compra del archipiélago por parte de Japón pone en duda el efecto legal de la Declaración de El Cairo y la Declaración de Potsdam (acuerdos internacionales firmados al final de la Segunda Guerra Mundial) y además agrava las disputas territoriales entre los dos países.
Panetta ha expresado la preocupación de Estados Unidos por la posibilidad de que "estas disputas puedan derivar en conflictos mayores y en más violencia". "Comprendo las profundas heridas que sufrió China durante la Segunda Guerra Mundial", pero, "al mismo tiempo, no podemos vivir en el pasado", ha declarado en una academia militar china.
PROTESTAS
Las empresas niponas han cerrado cientos de comercios y fábricas en China y algunas han enviado de vuelta a Japón a sus trabajadores por el temor de que las protestas se descontrolen.
Este martes, algunos manifestantes lanzaron botellas contra la Embajada de Japón en Pekín y corearon frases contra la ocupación de China por parte Japón (en las décadas de los años 30 y 40). Pero la legación diplomática ha dicho este miércoles que ya han acabado las protestas.
También el martes, unos 50 manifestantes chinos rodearon y dañaron un coche en el que viajaba el embajador estadounidense, Gary Locke, junto a su Embajada, que está cerca de la de Japón.
"El personal de la Embajada se ha reunido con el Ministerio de Asuntos Exteriores para expresar nuestra preocupación pero también para pedir que se haga todo lo posible para proteger a nuestro personal y nuestras instalaciones en China", ha explicado Locke ante un grupo de periodistas. El Ministerio, ha añadido, "se ha comprometido a realizar una revisión minuciosa".