El aniversario del derrocamiento de Marcos suscita comparaciones con Duterte entre activistas filipinos

Según recoge el diario 'Phil Star', más de mil activistas han participado en distintos actos para homenajear a la revuelta que hace 31 años supuso la caída pacífica de Marcos.

El dictador fue enterrado el año pasado en un cementerio reservado para los héroes de la nación, en una decisión de Duterte que fue duramente criticada por amplios sectores del país.

Por su parte, la administración filipina ha conmemorado el aniversario de una forma austera en la principal base del país, cerca de donde ha transcurrido la marcha ciudadana. Al acto no asistió Duterte, lo que le ha suscitado las críticas al considerar que los escasos actos oficiales se deben a un actitud de connivencia con respecto a los seguidores de Marcos.

En un intento de acallar las críticas, el portavoz presidencial Ernesto Abella ha destacado que el dictador "no es una figura icónica para el presidente".

"Es mucho decir que él sea el nuevo Marcos", ha apuntado Abella en referencia a los paralelismos que a menudo utilizan los detractores de Duterte para describir sus formas autoritarias.