Las autodefensas condicionan su desarme a la detención de 100 'templarios'

Beltrán, que lidera las autodefensas de Tepalcatepec, ha insistido en que antes de su desarme y desmovilización es necesario que las autoridades ofrezcan respuestas más contundentes contra el crimen organizado, ya que, a juicio de las autodefensas, son insuficientes las dadas hasta la fecha.

"Hay que entender que solo han matado a (Francisco Galeana Núñez) 'El Pantera', a (Nazario Moreno) 'El Chayo' y a (Enrique) Plancarte. Hay otros 100 (cargos) intermedios que están por ahí moviéndose, muy agresivos. Todavía tienen sus armas y, si nos desarmamos primero, nos matan. Tengo la lista de quiénes son y se la voy a dar al Gobierno", ha señalado Beltrán.

Los "intermedios" a los que se refiere Beltrán son un centenar de cabecillas de los distintos municipios del estado de Michoacán --los "jefes de plaza"--, así como un indeterminado número de sicarios, que conforman la estructura intermedia de Los Caballeros Templarios, más allá de sus líderes principales

En un principio, las autodefensas habían condicionado su desarme a la eliminación de los siete jefes del cártel, de los cuales ya solo restan tres por abatir o detener, pero no habían incluido en sus reivindicaciones la detención de la cúpula intermedia, según ha recordado el periódico mexicano 'Milenio'.

Los líderes 'templarios' abatidos hasta la fecha han sido Nazario 'El Chayo' Moreno y Enrique 'El Kike' Plancarte; mientras que Dionisio 'El Tío Nicho' Plancarte y Gerónimo 'El Toro' Vásquez, han sido detenidos. Los otros tres cabecillas que siguen prófugos son Servando 'La Tuta' Gómez, Fernando 'El Tena' Cruz, e Isidro 'El Chicano' Virrueta.

Este jueves diferentes localidades y municipios de Tierra Calientes vivirán una jornada simbólica, marcada por las movilizaciones del movimiento de las autodefensas, en conmemoración del primer aniversario de la masacre de los productores de limón de la zona, la cual desencadenó el surgimiento de estos grupos de civiles armados.

DESARME FALLIDO

La situación de posible desarme se encuentra en punto muerto, porque las autodefensas han seguido reivindicado su derecho a defenderse de los ataques del cártel, en detrimento de las peticiones del Gobierno para que depongan las armas.

En ese sentido, el comisionado para la Seguridad de Michoacán, Alfredo Castillo, insiste en el desarme, llegando incluso a afirmar hace unos días que tal suceso se produciría en las próximas semanas. Una situación que no contemplan las autodefensas, como han venido manifestando en las últimas fechas.

"No vamos a permitir que nos vengan a desarmar ya que aún no hay un Estado de Derecho. El día que estemos seguros enterraremos las armas o ya vemos que hacemos con ellas", expresó ayer el portavoz del Consejo de Autodefensas de Michoacán, José Manuel Mireles.

Las autodefensas esgrimen esa teoría de la falta de seguridad que podrían sufrir los municipios si dejan las armas, ilustrándola con la reciente detención de Hipólito Mora, figura insigne de las policías comunitarias, que tuvo que huir del municipio de La Ruana tras sufrir el acoso de Antonio Torres, alías 'Simón El Americano', una vez se aceleró el desarme de la localidad michoacana.

"El que hayan destruido a las autodefensas de aquí, que hayan encarcelado a Hipólito Mora, significó la expulsión de muchas personas por parte del nuevo grupo que llegó", advirtió el párroco de la localidad, José Luis Segura, quien apuntó a la relación de 'El Americano' con el crimen organizado, tal y como otros grupos de autodefensa alertaron en su momento.