El Gobierno de Cospedal rechaza suprimir las diputaciones, pero acepta organizar los servicios para evitar duplicidades

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha rechazado la propuesta del candidato socialista a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, de suprimir las diputaciones al considerar que son instituciones que tienen una "garantía constitucional", pero ha dicho que sí acepta soluciones como organizar los servicios para evitar duplicidades entre las distintas administraciones.

"Lo que si nos podemos plantear es organizar los servicios de forma que no haya duplicidades y en eso, siempre, nos encontrara el PSOE", ha señalado el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas, Jesús Labrador, en una rueda de prensa para hacer balance de los cincuenta días transcurridos desde la toma de posesión de los consejeros de la Junta de Comunidades.

Es más, Labrador ha desvelado que la Junta ya ha iniciado trámites para coordinar con las distintas diputaciones y ayuntamientos la prestación de servicios, igual que se pide la coordinación con otras regiones.

Un día después de que Rubalcaba apostara por una reforma profunda de las diputaciones provinciales, el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas ha ironizado diciendo que Rubalcaba al ser "químico" puede plantearse este tipo de "experimentos".

No obstante, ha defendido que la Constitución, en su artículo 141, recoge que las provincias son una entidad local, que estarán gobernadas por las diputaciones u otra entidad de carácter similar.

Ha opinado que Rubalcaba, en su paso por la provincia de Toledo cuando fue candidato, "no comprendió" la naturaleza, al menos de la provincia, recordando que Toledo tiene 204 municipios y Castilla-La Mancha 919, de los cuales 840 tienen menos de 5.000 habitantes.

Dicho esto, ha puesto de relieve que la Ley Reguladora de las Bases del Régimen Local, en su artículo 36, dice que las diputaciones prestarán asistencia a los municipios, especialmente a los más pequeños o los que no tienen capacidad para prestar determinados servicios.

"Yo comprendo que Rubalcaba desde su atalaya no comprenda la realidad social de regiones como Castilla-La Mancha, pero en una región con 840 pueblos menores de 5.000 habitantes hay que dotarles de unos servicios y, constitucionalmente y legalmente, estos servicios se prestan por la Diputación", ha proseguido.