El PDeCAT coloca a dos dimisionarios de la dirección como adjuntos de Turull en el Parlament

El diputado y alcalde de Valls (Tarragona), Albert Batet, y el diputado y alcalde de Besalú (Girona), Lluís Guinó, serán los nuevos adjuntos al presidente del grupo del PDeCAT en el Parlament, Jordi Turull, han informado a Europa Press fuentes del partido.

El partido ultima novedades también en su grupo en el Congreso de los Diputados después de que su portavoz, Francesc Homs, haya sido inhabilitado durante un año y un mes por el Tribunal Supremo por la consulta del 9N, según publica 'La Vanguardia'.

Estas decisiones llegan después de que un tercio de la dirección del PDeCAT haya dimitido de sus responsabilidades al frente del partido para cumplir con un régimen de incompatibilidades que les obligaría a dejar uno de los cargos institucionales que asumen, y que el último Consell Nacional rechazó modificarlo para permitir su continuidad.

Los que han abandonado la primera línea del partido son precisamente Albert Batet y Lluís Guinó, así como la diputada y alcaldesa de Calella (Barcelona), Monserrat Candini, y la directora general de Cooperación Interdepartamental del Govern, Elsa Artadi --las incompatibilidades establecen que una directora general no puede tener cargo en la dirección--.

De momento, Batet y Guinó ocuparán estas nuevas responsabilidades en la cámara catalana, una decisión con la que el partido quiere reforzar el control de sus diputados.

Está previsto, de momento, que el partido no cubra las cuatro vacantes y la dirección siga adelante con los ocho miembros restantes, con la posibilidad de que se reorganicen las tareas que llevaban a cabo, y a la espera también de las nuevas tareas que pueda encargar a Candini y Artadi.

En relación al Congreso, el PDeCAT perfila que el número dos en el Congreso, Carles Campuzano, sustituya Homs, aunque no se descarta que el escogido pueda ser el diputado Jordi Xuclà, aunque últimamente ha cogido fuerza el nombre del alcalde de Tortosa (Tarragona), Ferran Bel, según han explicado otras fuentes a Europa Press.

INCOMPATIBLIDADES

Las incompatibilidades ya fueron una de las cuestiones más espinosas del cónclave de julio, en el que se dio carpetazo a CDC, y, tras una propuesta de las juventudes aprobada de madrugada, se acordó que los dirigentes podían ejercer un máximo de dos cargos --orgánicos o institucionales--.

Después de ello, se nombraron a estos dirigentes a sabiendas de que incumplían el régimen, pese a que a la misma normativa les daba seis meses para renunciar a alguno de sus cargos.

La vicepresidenta del PDeCAT, Neus Munté, también estaba afectada por este régimen de incompatibilidades, al ser también portavoz y consellera del Govern y diputada en el Parlament, y finalmente optó por dejar su escaño.

Ya a finales de enero, la coordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal, anunció que Batet, Guinó, Artadi y Candini dejarían la dirección del partido una vez terminara el Consell Nacional que tenían previsto celebrar entonces en febrero.

Sin embargo, en dicho cónclave se hizo marcha atrás al aprobarse por mayoría hacer una excepción al régimen de incompatibilidades para permitir que los cuatro siguieran en la dirección, lo que finalmente se ha tumbado en el Consell Nacional de este marzo.