Pekín dice que Pyongyang está dispuesta a continuar las consultas sobre la crisis nuclear

El portavoz de turno de la cancillería china, Ma Zhaoxu, señaló hoy que el ministro Wang Jiarui, responsable de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de China, regresó de su viaje de cuatro días a Corea del Norte, donde ayer se reunió con Kim y le transmitió un mensaje del presidente chino, Hu Jintao.

Wang mencionó que Pekín está dispuesto a trabajar con Corea del Norte para reforzar su "tradicional amistad y reforzar la cooperación práctica para gestionar el problema nuclear en la península coreana".

Ma mencionó que el diálogo iniciado en 2003 entre ambas Coreas, EEUU, Rusia, Japón y China que se encuentra estancado desde hace más de un año, es un proceso "complejo y sensible", y que sólo a través de "las negociaciones y el diálogo diplomático" se podrá llegar al objetivo, que es el de desmantelar el programa nuclear norcoreano.

El portavoz chino reiteró la petición de su gobierno de pedir flexibilidad y disposición al diálogo por parte de todos los países concernidos con el fin de regresar pronto a las negociaciones.

En rueda de prensa, el portavoz admitió que el subsecretario general para Asuntos Políticos de la ONU, Lynn Pascoe, visitó China en los últimos días, donde se reunió con el titular de su cartera, Yang Jiechi, antes de trasladarse hoy a Pyongyang para abordar la crisis norcoreana y la ayuda humanitaria al país comunista.

Sin embargo, el portavoz chino declinó informar sobre la llegada hoy a Pekín del negociador norcoreano en el diálogo nuclear, Kim Kye-gwan, acompañando al ministro Wang Jiarui a su regreso a China.

Tampoco confirmó noticias de que el hasta ahora delegado chino en el diálogo multipartito, Wu Dawei, vaya a dejar su cargo de jefe de la delegación: "El diálogo no se ha reiniciado todavía, por lo que no puedo comentar. Se sabrá quién va a ser el delegado cuando se reanude", dijo Ma.

El diálogo multipartito se paralizó en diciembre de 2008 y en abril de 2009 Pyongyang anunció su retirada definitiva de la mesa de diálogo en respuesta a las sanciones de la ONU impuestas por su lanzamiento de un cohete de largo alcance por parte de Pyongyang.

Para reanudar esas negociaciones Corea del Norte exige el levantamiento de esas sanciones y la firma de un tratado de paz que reemplace el armisticio que puso fin a la guerra de Corea (1950-1953).