Dos excargos del gobierno valenciano condenados compartirán cárcel con Blasco al elegir Picassent (Valencia)

Por su parte, otro de los condenados en esta causa, el presidente de la Fundación Cyes, Marcial López, al que se le impusieron tres años y nueve meses de prisión, ha elegido la cárcel de Castellón para cumplir su pena, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

Rafael Blasco fue el primer ex alto cargo de la Generalitat Valenciana que entró ayer en prisión para cumplir su condena de seis años y medio por malversar ayudas al tercer mundo. En concreto, por irregularidades en la concesión de ayudas por parte de Solidaridad a la Fundación Cyes para proyectos en Nicaragua.

Mientras Blasco, de 69 años y con una larga trayectoria política de la mano de diferentes partidos políticos, ingresó ayer en Picassent sobre las 9 horas, otros tres condenados --Sanjuán, Català y López-- acudieron al tribunal valenciano para indicar la cárcel en la que cumplirán su condena ratificada por el Tribunal Supremo. Tenían de plazo la jornada de ayer para ingresar. Inicialmente, el exconseller también debía de haber acudido este lunes al TSJCV a realizar el mismo trámite, pero sorpresivamente y para evitar a los medios de comunicación se adelantó y lo hizo el pasado viernes.

Tanto Sanjuán como Català y López se presentaron en el TSJCV con semblante serio y abatido. Ninguno de ellos quiso hacer declaraciones a los medios de comunicación, y simplemente Català, preguntado por si consideraba injusta la condena, hizo un gesto afirmativo y siguió su camino.

EL RESTO DE CONDENADOS

El TSJCV dejó en suspense la entrada en prisión para otros dos condenados en este procedimiento: el exjefe de gabinete de Blasco, Javier Llopis --al que se le impusieron dos años de prisión, y se le fijó una multa de 2.250 euros--; y una trabajadora de la Fundación Cyes y mujer de Marcial López, Josefa Cervera --a la que le han recaído otros tres años--. Esta última pidió la suspensión de la ejecución de la pena hasta que se tramitara el indulto que ha solicitado al Gobierno.

Así mismo, otro condenado, el cabecilla de la trama, el empresario Augusto César Tauroni, ya se encuentra actualmente en prisión por este asunto --era el único que ingresó en la cárcel nada más producirse las detenciones por riesgo de fuga--. Y otras dos personas que se sentaron en el banquillo por este procedimiento, el ex director general de la extinta conselleria, Josep María Felip, y el exjefe del servicio de Cooperación, Marc Llinares, resultaron absueltos por el Tribunal Supremo.