Ecologistas lleva a la Fiscalía la aparición de cebos envenenados y la muerte de ejemplares de especies amenazadas

En una nota, Ecologistas en Acción explica que ha solicitado al Ministerio Fiscal que se incrementen los esfuerzos de control e investigación de cotos de caza menor, tanto en la Sierra Sur como en la Campiña sevillana, y muy especialmente entre los meses de enero a agosto, "periodo en el que suelen actuar los delincuentes al perseguir a pequeños y medianos predadores para salvaguardar sus negocios y aficiones".

Así, la asociación ha relatado cómo en un coto de Osuna, entre el sábado y el lunes pasado, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil halló cajas trampa, lazos, tubos-trampa de PVC y cebos envenenados en dos puntos de la sierra, Valdiva y Ratera Nueva. El resultado fue de dos zorros, un perro y un tejón muertos por lazos desde hace algunas semanas, además de varios cebos a base de embutidos con plaguicidas.

No muy lejos, en La Venta del Palmar, en Écija, en los primeros días de esta semana, el Seprona encontró unos 15 cebos envenenados con el balance de un gato doméstico y un milano real muertos, especie ésta en peligro de extinción. En este mismo lugar, en los dos años anteriores, también se encontraron plaguicidas en una considerable cantidad de despojos de pollo.

Sin salir de la campiña sevillana, en el arroyo Guadairilla, a un par de kilómetros de la ciudad de Alcalá de Guadaíra, se hallan el pasado martes tres cadáveres de milanos negros, en otro coto de caza.

Por otro lado, y sobre la gestión del Ejecutivo andaluz, Ecologistas ha manifestado que "gracias a la Junta de Andalucía y a su inquebrantable apoyo al mundo de la caza, erigiéndolo en modelo sostenible y necesario para la buena salud de la economía y los ecosistemas de la región, disponemos de más del 97 por ciento del territorio convertidos en cotos de caza".

La Federación Provincial de Ecologistas en Acción-Sevilla "no puede más que lamentar que estos delitos ambientales detectados, son la punta de iceberg de lo que ocurre en nuestros campos". "No es posible controlar tantos cientos de miles de hectáreas ante la falta de recursos humanos que se da en el Seprona y los Agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía: o se multiplican los recursos humanos y materiales para controlar centenares de cotos de caza o se hace disminuir el número de estos", ha apostillado.