Expertos muestran su preocupación en el Vaticano por la falta de acceso a cuidados paliativos en África

Así lo han puesto de manifiesto en el marco de la reunión con la que se ha puesto en marcha el proyecto PAL-LIFE de la Academia Pontificia para la Vida del Vaticano, un proyecto que tiene como fin difundir y promover los cuidados paliativos en todo el mundo y en el que participan los investigadores del Programa ATLANTES del Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra.

"La mayor preocupación que reinó en la sala fue que en África se mueren de dolor porque no hay algo tan barato, tan sencillo como la morfina", señala en declaraciones a Europa Press el investigador principal del Programa ATLANTES, Carlos Centeno. También recuerda las palabras del portavoz de India, que planteó las dificultades de acceder a estos cuidados en un país de más de mil millones de habitantes.

Por ello, coincidieron en que la solución no puede pasar por acciones puntuales sino por una concienciación de la importancia de los cuidados paliativos a través de las iglesias nacionales y locales. "La Iglesia no tiene una varita mágica para poner morfina en Uganda, pero sí puede transmitir un estímulo a los católicos y si eso llega a la última Conferencia Episcopal del último país, las barreras irán cayendo", precisa Centeno.

ESPECIALIZACIÓN DE LOS MÉDICOS

Asimismo, pusieron el foco en la necesidad de una especialización de los médicos en cuidados paliativos, una cuestión que, en el caso de España hace que no esté a la cabeza de los países de la UE en esta disciplina --se sitúa en la posición número 12 de 25, según un estudio de la Universidad de Navarra--.

"En España, los profesionales de cuidados paliativos siguen en precario; no hay una especialidad, a diferencia de otros países como Portugal, Francia o Reino Unido. Es una vergüenza", lamenta Centeno. Si bien, precisa que ya hay algunas facultades de Medicina donde empiezan a impartirse asignaturas de cuidados paliativos.

Además de la educación y el acceso a los medicamentos, otros dos factores que indican el grado de desarrollo en el sistema de cuidados paliativos de un país son las políticas y los servicios por número de habitantes. Con respecto a esta última dimensión, Centeno apunta que es "muy insuficiente" el número de camas para enfermos terminales en los hospitales españoles.

SEDACIÓN PALIATIVA

Acerca de las políticas, Centeno considera que en España la estrategia nacional de cuidados paliativos no ha funcionado y sobre la proposición de ley de Ciudadanos sobre muerte digna, cree que no es una verdadera ley de cuidados paliativos que, a su juicio, debería regular no solo la sedación paliativa o la consideración del paciente a la hora de tomar decisiones sino también establecer un sistema de protección de los profesionales, una equidad en todo el Estado y una obligación de impartir la disciplina en las facultades de Medicina y Enfermería.

En todo caso, más allá del caso concreto de España, Centeno se centró en su exposición en el Vaticano en la situación de Europa occidental donde asegura que se encuentran "los mejores cuidados paliativos del mundo".

Carlos Centeno acudió a esta reunión junto a otro miembro del proyecto de investigación ATLANTES, Eduardo Garralda. Se trataba del primer encuentro en el cual se presentó un análisis del desarrollo de los paliativos en diferentes regiones y sus retos globales, a partir del que surgieron numerosos debates.

Entre los expertos en paliativos procedentes de todo el mundo, se encontraban también: Eduardo Bruera, que expuso la situación de Norteamérica; Liliana de Lima, que habló de Sudamérica; Sami Al Sirafy, de los Países Árabes; Emmanuel Luyirika, de África; Daniela Mosoiu, de Europa Oriental; M. Rajopagal, de la India; y Ling Sun Yong, de Asia. Por su parte, Katherine Pettus explicó el trabajo de las instituciones internacionales en la defensa de este área de la medicina.

En una primera etapa, el grupo aspira a estudiar la situación actual de los cuidados paliativos y las oportunidades y obstáculos para la introducción y desarrollo de esta disciplina.

CENTROS CATÓLICOS PARA PACIENTES TERMINALES

Asimismo, la Academia Pontificia para la Vida ha puesto en marcha un estudio en el marco de la Iglesia para determinar cuántos centros de cuidado y asistencia de inspiración católica trabajan con pacientes terminales; y analizar los aspectos profesionales y culturales de la situación.

Con los datos recabados, comenzarán a lanzar iniciativas de paliativos dentro y fuera de la Iglesia. También tienen como objetivo promover "una cultura de comprensión hacia la enfermedad y el sufrimiento que favorezca que los pacientes acepten la muerte con serenidad y los profesionales sanitarios cuiden de forma integral a los pacientes con enfermedades avanzadas".