El Gobierno inicia procedimiento sancionador contra la finca de Alberto Cortina en el Parque Nacional de Cabañeros

La organización Ecologistas en Acción denunció en el mes de octubre ante el Organismo Autónomo de Parques Nacionales la construcción de un vallado cinegético de nueva planta que se introducía más de un kilómetro en el Parque Nacional de Cabañeros, así como que la Junta de Castilla-La Mancha habría autorizado el vallado, "esquivando el preceptivo informe de la oficina técnica del parque".

La organización indicaba que dicho vallado se había realizado en la finca Valleleor, propiedad de la empresa Percacer S.A., cuyo titular último sería Alberto Cortina, propietario a la sazón de la colindante finca de las Cuevas, también con terrenos dentro del parque.

La malla cinegética, según los denunciantes, tendría una altura de 2 metros y una longitud de 2.085 metros de los cuales, aproximadamente la mitad, discurren dentro del Parque Nacional de Cabañeros. Ecologistas en Acción también explicaba que para realizar el vallado se había abierto una calle mediante desbroce de la vegetación en una de las zonas de mayor "valor botánico" del espacio protegido. Esta zona se ubica en la parte alta de la cuenca del río Estena, cuyo cauce ha sido cortado así como el de su valioso afluente, el arroyo de Valleleor.

La organización también rechazaba la justificación del propietario de la finca, que aducía como razón para el vallado evitar accidentes, ya que, según apuntaba, en la carretera CM-4157 que atraviesa la finca Valleleor no constan accidentes ni quejas al respecto en el ayuntamiento de Hontanar al cuál pertenece la finca. Además, añadían que en este tramo la carretera por su trazado no permite velocidades altas, por lo que la posibilidad de un accidente grave es "prácticamente nula".

Según datos oficiales, un total de 13 propietarios tienen fincas privadas dentro de los límites del Parque Nacional de Cabañeros.