La ONU asegura que persiste una situación humanitaria grave en Colombia

En una rueda de prensa, Holmes señaló que la población desplazada se encuentra muy dispersa por toda Colombia y, por ello, no es fácil manejar programas de asistencia.

"El problema humanitario principal es la población desplazada, que está muy dispersa en todo el país y que no es fácil de manejar. Hay áreas en las que hay que trabajar mucho más, pero también hay que hacer mucho más para ayudar al Gobierno por parte de la comunidad internacional", indicó Holmes.

Añadió que, en sus conversaciones con el ministro de Interior, Fabio Valencia, el canciller, Jaime Bermúdez, otros funcionarios del Gobierno colombiano y representantes de la sociedad civil se dio cuenta de que hace falta un trabajo más coordinado y complementario.

"Podemos hacer más para ayudar a prevenir el desplazamiento, nos gustaría mucho hacerlo", afirmó.

Holmes visitó algunos caseríos del departamento de Chocó, uno de los más deprimidos del país, donde se reunió con indígenas y afroamericanos desplazados por el conflicto armado en Colombia, que ya dura más de cuatro décadas.

"En Chocó hubo un énfasis especial sobre los temas de las comunidades afrocolombianas e indígenas que están en lugares muy remotos y pobres del país, y particularmente afectadas por el conflicto y la violencia continua en las áreas donde ellos viven", dijo.

En su visita a Bebedó, una pequeña aldea que en noviembre del año pasado se inundó totalmente por las fuertes lluvias y a la que solo es posible llegar a través de lanchas por el río San Juan, revisó algunas ayudas que ha entregado el Fondo Central de Respuesta a Emergencias (CERF) de la ONU a los lugareños.

Un fotógrafo de Efe constató que los pobladores, en especial los niños, aún están temerosos ante otra posible inundación y se preparan para una eventual emergencia.

En 2009, Colombia se convirtió en el quinto país receptor de ayuda del CERF con un total de 8,1 millones de dólares destinados a emergencias.

"Desafortunadamente, me temo que el cambio climático hará que las inundaciones en el futuro sean peores; 1,6 millones de personas fueron afectadas por las inundaciones en Colombia, puede que no ocurra lo mismo este año o cada año, pero la tendencia mundial es hacia un aumento", advirtió Holmes.

Holmes también visitó un albergue de indígenas desplazados que llegaron hace un par de días a Condoto y señaló que esa población es víctima en ocasiones del confinamiento, que "induce muchas veces al reclutamiento en los grupos armados ilegales, sobre todo por parte de los menores, y además crea problemas de minas (antipersonales)".

Condenó una matanza de varios indígenas awa, aún sin esclarecer, en el suroeste de Colombia y ocurrida a principios de febrero.

Exigió a la guerrilla de la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), presuntamente implicada en esa matanza, que "como mínimo" entregue los cadáveres lo más pronto posible sin causar más muertes en esas comunidades.

Además, pidió a los actores del conflicto armado que garanticen que la ONU pueda cumplir su rol humanitario en Colombia.

El subsecretario de la ONU se reunió con el presidente colombiano, Álvaro Uribe, después de la rueda de prensa para manifestarle su preocupación por los desplazados.

Mientras el Gobierno colombiano reconoce que hay 2,3 millones de víctimas del desplazamiento en la última década, distintas ONG calculan que podrían alcanzar los cuatro millones en los últimos 20 años.