La Procesión del Santo Entierro, la más importante de la Semana Santa bilbaína, reunirá 14 pasos este viernes

Organizada por la Cofradía de la Santa Vera Cruz, partirá a las 19.30 horas de la Parroquia de los Santos Juanes, para pasar por La Cruz, Portal de Zamudio, Tendería, Carrera de Santiago, Plaza de Santiago, Bidebarrieta, Arenal, Navarra, Plaza Circular, Gran Vía y Plaza Moyúa.

Según ha informado la Hermandad de Cofradías Penitenciales de la villa de Bilbao, se trata de la procesión más importante de Bilbao, en cuanto se refiere la asistencia de público y a la calidad de las imágenes que procesionan, tanto desde un punto de vista histórico como artístico.

Es la segunda de las dos procesiones generales y continúa el relato de la Pasión iniciado el Jueves Santo, con obras de "incalculable" valor artístico, portadas por más de 1.000 penitentes, que hacen que Bilbao mantenga su Semana Santa entre una de las más destacadas del Norte de la Península.

De entre ellos destacan dos composiciones escultóricas: el Ecce-Homo (Ricardo Iñurria, 1944), de gran nivel como paso de misterio por su sentido de la proporción y la disposición y expresividad de las imágenes y la Piedad de Juan Pascual de Mena (1756), la joya de la Semana Santa Bilbaína como grupo escultórico.

ECCE-HOMO

Abre la procesión el Ecce-Homo, empujado por los portadores de la Cofradía de la Pasión, propietaria del paso. En segundo lugar sale el paso de Santa María Magdalena, portada por la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, obra de Lourdes Hernández.

Procesiona junto a la titular de la Cofradía, la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, de un gran fervor popular y réplica de la titular de Medinaceli que recibe culto en Madrid. A continuación saldrá la Cofradía del Apóstol Santiago, portando dos pasos, uno de su propiedad, el Cristo del Perdón (anónimo, s. XVII), y otro que es una gran obra maestra, Jesús con la Cruz a Cuestas (Raimundo Capuz, 1705).

Este paso es propiedad de la Cofradía de la Vera Cruz, como la mayoría de los bilbaínos, quien lo cede para ser portado por esta cofradía.

Además, procesionará el paso del Encuentro (1955), de medidas superiores a las habituales y de corte modernista, realizado por Tomás Parés, propiedad de la Cofradía de la Madre de Dios de las Escuelas Pías, que lo porta.

A continuación, procesionará el paso de mayores dimensiones de la Semana Santa Bilbaína, también propiedad de la Cofradía de la Vera Cruz, conocido popularmente como el paso de Las Tres Cruces (1945), aunque algunos le denominan el de La Lanzada. Destacan las caras de las imágenes, obra del imaginero Quintín de Torre, que realizó varios pasos para la Semana Santa Bilbaína. Inmediatamente, desfilará el "Abanderado de la Villa - Semana Santa 2015", abriendo el cortejo del municipio formado por el Sto. Cristo de la Villa y la Banda municipal de música, portando la bandera de Bilbao.

PARTICIPACIÓN DEL PUEBLO

El nombramiento, instituido por la Cofradía de la Santa Vera Cruz, es un cargo de duración anual que pretende hacer visible la participación del pueblo de Bilbao en la procesión. Este año ha recaído en la Santa y Real Casa de Misericordia de Bilbao, portando la enseña Antonio Barandiarán, presidente de la Junta de Caridad de esta institución. Después, portado por los propios cofrades de la Santa Vera Cruz procesionará el Cristo de la Villa (Juan de Mesa, 1590). Este título lo recibió la imagen del consistorio bilbaíno.

Se trata de un Crucificado de pequeñas dimensiones pero de gran valor artístico y cultural. Es tradicional que lo adornen con flores rojas y blancas.

En este punto de la procesión saldrá por segunda vez a las calles de Bilbao el paso de misterio del Santo Cristo de la Humildad, (2002), obra de Enrique Ruiz Flores, representando los momentos de oración de Jesús en el Calvario, inmediatamente antes de ser crucificado. Sus andas, aún a medio tallar, volverán a Córdoba al terminar la Semana Santa para que su autor, el tallista Oscar Soria, continúe su trabajo. Se espera que retornen terminadas a Bilbao y se estrenen en la Semana Santa 2016.

El cortejo procesional continuará con el Descendimiento, otra composición de Quintín de Torre (1926), en la que resalta la fuerza expresiva de las imágenes que lo integran: el cadáver de Jesús, al aire, entre los brazos de Nicodemo y de San Juan Evangelista. Ya va cerrándose la procesión, y lo hace con la imagen de Nuestra Señora de la Piedad (1756). Para muchos, esta obra de Juan Pascual de Mena es la obra más importante de la Semana Santa Bilbaína.

SALIR A LAS CALLES

Realmente, la composición de Cristo con su Santísima Madre se hizo para altar, pero el trabajo de unos y otros ha hecho que la imagen pueda salir a la calle desde algo más de cinco décadas. A pesar de ser propiedad de la Parroquia de San Nicolás, lo porta la Cofradía de Nuestra Señora de la Merced, que para la mayoría es la que más se ajusta a la sobriedad de la Semana Santa Bilbaína.

Cierran la procesión los pasos de San Juan (José Larrea, 1944) y de la Virgen de la Soledad (Raimundo Capuz, 1693), como es tradicional, tanto el Jueves como el Viernes Santo. Entre ambos pasos, penitentes de la Vera Cruz portan el Lignum Crucis, joya espiritual de la Cofradía decana de las bilbaínas, astilla de la Cruz del Calvario.

Finalizará el recorrido en la Plaza Federico Moyúa, donde el obispo de Bilbao, Mario Iceta, dirigirá unas palabras a los cofrades de Bilbao y cantará la Salve con ellos y con el pueblo.