Robaba joyas en la casa donde daba clases particulares y luego las pasaba a sus padres para venderlas

Agentes de la Policía Nacional de Torrent (Valencia) han detenido a una joven de 17 años y a sus padres de 36 y 52 años, de nacionalidad española, como presuntos autores de un delito de hurto, ya que supuestamente la menor se apoderó de dinero y joyas en la casa donde daba clases particulares, que posteriormente el matrimonio vendía en un establecimiento de compra-venta asegurando que eran de una herencia familiar.

Según ha informado la Jefatura Superior de Policía en un comunicado, las investigaciones se iniciaron cuando los policías tuvieron conocimiento de que un matrimonio podría estar vendiendo joyas, que decían ser de una herencia familiar, en una casa de compra-venta de oro en Torrent.

Durante las investigaciones, los agentes averiguaron que estas joyas habían sido hurtadas presuntamente por la hija del matrimonio, menor de edad, de la casa donde trabajaba ya que había sido contratada al finalizar el curso escolar para cuidar y ayudar en los estudios a otra menor durante el mes de julio.

La joven aprovechó sus horas en este domicilio para presuntamente registrar y apoderarse de 950 euros en efectivo y joyas de la familia. La chica entregaba las joyas sustraídas a sus progenitores, que realizaron la venta de las joyas durante los días 28 y 29 de julio y 1,2 y 4 de agosto en una casa de compra-venta de oro.

En dos ocasiones, la menor de edad fue acompañada de su madre y en tres ocasiones de su padrastro para la venta, y obtuvieron por ellas 2.120 euros. El pasado jueves, los policías, tras las averiguaciones pertinentes, detuvieron en las inmediaciones del domicilio familiar a los tres sospechosos por un presunto delito de hurto.

A continuación se realizó un registro en el domicilio familiar donde se intervino joyas y 425 euros en efectivo. Finalmente, los policías recuperaron la mayoría de joyas y pudieron ser entregadas a su legítima propietaria. Los padres, sin antecedentes policiales, pasaron a disposición judicial, mientras que la menor de edad quedó tutelada por un familiar.