Trabajadores enfermos de la "zona cero" aceptan el acuerdo de indemnización

La firma de abogados que lleva el caso, Worby, Groner, Edelman & Napoli, Bern confirmó a Efe que un 95,1 por ciento de los demandantes que podían recibir compensación aceptó hoy el acuerdo extrajudicial alcanzado en su día entre ese despacho y las autoridades locales, que necesitaba de la aprobación de los afectados para poder entrar en vigor.

Además, detalló que el acuerdo fue aceptado por el 98 por ciento de los demandantes que sufrieron las enfermedades más graves, como asma agudo y cáncer de pulmón, entre otras dolencias.

Ese porcentaje se reduce ligeramente entre los demandantes con problemas médicos más suaves debido a la participación en la limpieza de los escombros tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, que acabaron con la vida de casi 3.000 personas.

"Este acuerdo es justo y una buena resolución de las peticiones de los trabajadores porque protege a quienes ayudaron a la ciudad cuando más lo necesitaba", afirmó hoy en un comunicado el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg.

El alcalde aseguró que la ciudad continuaría "con su compromiso de dar tratamiento a quienes estuvieron presentes en la 'zona cero'".

La compensación a cada trabajador dependerá de la importancia de las enfermedades que sufra: En el caso de graves enfermedades respiratorias podrían recibir entre 800.000 dólares y 1,05 millones, mientras que se destinarán aproximadamente 1,5 millones en el caso de quienes fallecieron como causa de la contaminación.

Paul Napoli, socio de la firma de abogados que ha llevado la demanda de los trabajadores, afirmó que su firma "ha negociado para llegar a este acuerdo, que realmente es el mejor de los resultados posibles".

Miles de trabajadores de la construcción que participaron en las tareas de desescombro de la "zona cero", así como bomberos, policías y sanitarios, empezaron a presentar demandas en 2003 contra la ciudad y numerosas compañías privadas alegando que las enfermedades que padecían, desde asma a cáncer de pulmón, estaban vinculadas con su trabajo en el destruido World Trade Center.

Además, para compensar a los trabajadores afectados por ese desescombro, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el pasado septiembre una ley que proporcionará cobertura médica a los voluntarios que intervinieron el 11-S.

Por su parte, Christine LaSala, presidenta de la aseguradora encargada de abonar la indemnización, WTC Captive Insurance Company, manifestó su esperanza de que "este acuerdo logre cerrar las heridas de los héroes de ambas partes del caso, que hicieron su mejor esfuerzo para reparar nuestra ciudad y comunidad en aquellos difíciles meses posteriores al 11-S".