Una fotógrafa hizo un llamamiento en las redes sociales para hacer un experimento que rompiera todos los estereotipos. Mujeres de todas las edades, tallas, razas, dispuestas a ponerse un vestido negro de la talla 38. "La presión del estereotipo la sentimos todas. No necesariamente la más delgada tiene menos complejos", cuenta la creadora de la exposición, donde se ven mujeres de los 19 a los 80 años con la oportunidad que se les niega normalmente.