Un grupo de artistas francesas tacha de "puritanismo" las campañas contra el acoso

Las reacciones a la ola de denuncias públicas contra el acoso sexual en Hollywood son cada día más abundantes y variopintas. Desde que saltara a la luz el caso Harvey Weinstein, cientos de actrices de todo el mundo, así como mujeres de todos los gremios de trabajadores, han afirmado haberse sentido acosadas sexualmente en aras de su trabajo.

Pero no todas las actrices han reaccionado de la misma manera a esta lacra. Es el caso de la artista francesa Catherine Deneuve, quien ha firmado un escrito junto con otras 100 mujeres, en el que expresan su punto de vista sobre los acontecimientos vividos desde hace algunos meses.

En la carta, publicada por el diario francés Le Monde, se afirma que se ha llevado a cabo una auténtica "caza de brujas" seguida de una amenaza "la libertad sexual", para la cual, según las firmantes, es "indispensable" la "libertad de molestar". "La violación es un crimen, pero tratar de seducir a alguien, incluso de forma persistente o despreocupada, no lo es, ni los hombres son un ataque machista", recoge el escrito.

"Los hombres han sido castigados sumariamente, obligados a abandonar sus trabajos cuando lo único que hacían era tocar la rodilla de alguien o tratar de robar un beso" continúa.

El escrito también ataca directamente a las numerosas campañas que se han podido ver en los últimos meses en las redes sociales. Dichas iniciativas han sido seguidas por mujeres de todo el mundo, quienes han mostrado su valentía y han confesado que ‘ellas también’ (#MeToo, reza el hashtag original), han sido víctimas de algún tipo de acoso en su ámbito profesional.

La tribuna tacha estas campañas de un acto de “puritanismo”, y asegura que lo único que se han conseguido ha sido ponerse “al nivel de los delincuentes sexuales”. "No creo que sea el método correcto para cambiar las cosas, es excesivo", afirmó Deneuve el año pasado, refiriéndose al hashtag #MeToo.

"Como mujeres, no nos reconocemos en este feminismo, que más allá de denunciar el abuso de poder adquiere un odio hacia los hombres y hacia la sexualidad", recoge la carta.

La carta está firmada por un centenar de personalidades tan conocidas como la escritora Catherine Millet y la actriz y cantante alemana Ingrid Caven.