Un herido grave y cuatro leves por derrumbe de estructura de obras en Alcúdia

El hombre, que se encuentra ingresado en el Hospital de Son Dureta, necesitará someterse a una operación por fractura de una vértebra cervical, pero no con urgencia, y se encuentra estable.

Presenta "fractura de la segunda vértebra cervical sin compromiso cervical", lo que indica que no sufre lesión medular, según fuentes del centro hospitalario.

Tres de los heridos leves han tenido que ser trasladados al Hospital de Muro con traumatismos en los brazos, traumatismo toraco-abdominal y traumatismo dorsal y contusiones en una cadera.

El cuarto herido leve no ha requerido hospitalización y ha sido atendido en el lugar del derrumbe.

La Conselleria de Trabajo y Formación del Govern ha indicado que el accidente se ha producido a las 09.50 horas por el derrumbe de un encofrado en la segunda planta de la estación de autobuses Can Ramis, en Alcúdia, que construye el Ayuntamiento.

Al lugar han acudido un técnico de prevención de riesgos laborales de la Dirección General de Salud del Govern y un inspector de trabajo del Ministerio de Trabajo, con el objetivo de analizar las causas del accidente.

En este sentido, el secretario de salud laboral de la Federación de Construcción y Madera de CCOO (FECOMA), Juan Antonio Zamorano, ha asegurado que la causa podría ser "la falta de cálculo en los puntales utilizados en la obra, que son débiles".

Zamorano, desplazado al lugar de los hechos, ha señalado, en declaraciones a Efe, que en su opinión los puntales son débiles: "Los veo muy sensibles y considero que no se deberían utilizar este tipo de puntales para esta clase de obras", ha añadido.

El sindicado UGT ha afirmado, por su parte, que la prevención sigue siendo una "asignatura pendiente" en la comunidad balear y ha opinado que el accidente denota que, "una vez más", se ha producido un "grave déficit" en el sistema de prevención de riesgos laborales.

A este respecto, el director de la Asociación de Constructores de Baleares, Manuel Gómez, ha recordado que el índice de siniestralidad en la construcción en 2008 bajó un 12,8 por ciento respecto a 2007 y se ha felicitado de que el siniestro no haya sido mortal.