Unas 500 personas piden la liberación de Marc Marginedas, periodista de El Periódico.

El comité de empresa y el comité profesional del diario prevén repetir la reivindicación a las 17 horas de cada miércoles, el día de la semana en que contactaron con él por última vez, el 4 de septiembre.

La concentración ha durado unos 15 minutos, seguida de un largo aplauso, y ha incluido un manifiesto leído por los redactores del diario Luis Miguel Marco (en catalán) y Montse Martínez (castellano), ante periodistas, amigos, familiares y ciudadanos, entre los que se ha podido ver al líder de ICV en el Ayuntamiento de Barcelona, Ricard Gomà.

El manifiesto constata que, mientras cumplía su trabajo, retuvieron a un profesional "comprometido con un periodismo valiente y con buscar la verdad".

BUSCAN ESPÍAS ENTRE PERIODISTAS

El director del diario, Enric Hernández, ha declarado que se han decidido a hacer pública su situación con el objetivo de demostrar públicamente que es un enviado especial, porque los secuestradores buscan espías entre los periodistas.

Ha recordado que Marginedas lleva 16 años como corresponsal de guerra --por ejemplo, en Chechenia--, fue corresponsal en Moscú, ha viajado a Siria tres veces, y que es un hombre "inquieto, que no sabe estar sentado en la redacción".

UN CONFLICTO MÁS PELIGROSO

La redactora jefe de Internacional, Marta López, ha relatado que "él decía que era uno de los conflictos más peligrosos que había cubierto porque debía moverse junto a un grupo insurgente", y en su penúltima crónica ya avisaba de que la situación se complicaba.

"La situación en el norte de Siria cambió rápidamente y se abrió un conflicto abierto", ha añadido López, que ha destacado la importancia de los enviados especiales en las guerras para informar.

"Pero si vamos a escenarios donde, como Irak, los periodistas son víctimas de la guerra, no se darán las condiciones para trabajar", ha lamentado.