El otro Iván

Otro enanito de jardín

Al recuperado enanito de jardín que Iván había bautizado como Jesús le acompaña desde el miércoles un nuevo enano que Noemí Galera entregó directamente a quien más carantoñas había dedicado hasta ahora al primero. Este nuevo morador de la terraza de la academia ha sido bautizado como Iván, que sentenciaba: "Llamadme egocéntrica pero a este le voy a llamar Iván". Es el otro Iván, quien se encargará de mantener su recuerdo cuando el original haya de marcharse.

El tema elegido por Iván esta semana sí que nos muestra su otra cara, el auténtico 'otro Iván', que nada tiene que ver con las frivolidades muy bien representadas por enanos de jardín y otras estridencias. Iván Santos se ha decidido por la canción de Benny Ibarra con la motivación de su romántica letra, a la que da una intención que la convierte en todo un mensaje pleno de simbolismos. Iván transforma una canción de amor en una analogía de su supuesto abandono de la academia, del que él está convencido aunque no parece tan claro visto desde fuera. "Hoy desperté, te busqué/Me hizo falta estar contigo", simboliza su primer día fuera de la academia. "Mi hizo falta estar contigo/Quise rozar tu mirada", el anhelo por su abandono. "Añoré sentir tu mano sobre mi piel y mi alma", los recuerdos de tantos buenos momentos vividos aquí dentro. "Tu viajando por la adversidad/Yo volando sin poder asimilar/Que detrás de cada límite estoy", el paralelismo definitivo entre la lucha en la que continuarían sus compañeros, el empeño contra viento y marea por llegar hasta el final del concurso. Y también su humilde reconocimiento de las limitaciones propias, que habrían tenido como consecuencia su expulsión de la academia. 1

no solamente Esther

Grandes invitados en la academia

Impregnados una vez más de grandes dosis de buen humor, y quizá influidos por el fenómeno 'chiquilicuatrero', ayer visitó la academia Julio José Iglesias. Las visitan se suceden sin descanso y tras Carlos Baute (que desafinó de forma desmedida y se olvidó de la letra un par de veces) y Sergio Alcover, hemos visto pasar por aquí a David Civera y ahora al menos exitoso de los Iglesias Preysler. Hace tres días hacíamos unas preguntas que estaban encabezadas por la siguiente: "¿cuánto más bajará en adelante el nivel de los invitados?". Pues bien, la respuesta ha venido antes de lo esperado, y es la siguiente: mucho, señor mío, mucho. Ahora la pregunta que se hace media España y la academia en pleno es: "¿no hay cantantes en España?". Pasar sin sonrojo de Craig David a Julio José Iglesias es como emprender una carrera descendente que no puede conducir a nada bueno. Dado que no solamente nos han visitado cantantes sino que estuvo incluso Boris Izaguirre, habría que proponer nombres ilustres para próximas visitas, del tipo de Carmen de Mairena o 'Pozí'. Aunque para cantantes, como el 'Pollito de California' no van a encontrar otro.

No obstante, la conclusión ha sacar de todo esto es que la formación en esta academia es eficaz, por mucho que sea discutida en algunas ocasiones. Los primeros días vimos como ponían 'de hoja de perejil' (o sea, muy verde) a algunos de los invitados que recibíamos en la academia. Conchita, por ejemplo, fue víctima de las invectivas que lanzaron algunos tras su paso, lo cual mereció que el 'dilecto director' Llàcer les pidiera respeto y contención. Imagino lo mucho que habrán tenido que esforzarse ayer para no hacer sangre del personaje que les visitaba.

Mimi quiere un columpio en el escenario

Mimi Contaba 'Miss Melilla' en el desayuno que le gustaría hacer su actuación subida a un columpio, con un vestido de gasa muy vaporoso, como si flotara, mientras se columpia con un bailarín detrás para darle impulso y evitar que se caiga. Tres apuntes: el vestido y la estampa en sí más que vaporosa se antoja pavorosa; el bailarín a lo mejor lo quiere para caerse encima de él, lo cual sería explicable tras tanto tiempo de aislamiento; y, por último, parece que Mimi se ha creído Vanessa Paradís, que iba de esta guisa en un viejo 'spot' televisivo.

Quien tendrá que prepararse para el número que le están preparando es Virginia. En una gala de solistas donde varias de las actuaciones son canciones lentas, íntimas, de intensidad dramática contenida, a ella le ha tocado el tema del puente musical envenenado. Iván, Sandra y Pablo cantarán sin adornos, o al menos eso es de esperar. Tampoco el tema de Manu parece que se preste a florituras escénicas ni coreografías. Si acaso Noelia podrá demostrar lo bien que se le da el baile, y Chipper también tiene un tema movido en el que al menos mover las caderas. A Virginia le han buscado una versión de 'Moonlight Shadow' rebuscada para que tenga que bailar a las órdenes de Myriam. No podrá escaparse e improvisar esta vez, ya que deberá coordinar sus pasos con los del cuerpo de baile, al son de las notas de inspiración celta. El problema es que coordinación, baile y Virginia son términos casi incompatibles.

A este paso se cumplirá lo que pedía Iván (el fetén, Iván Santos, ese chico que cantaba musicales) y que consistía en que con cada expulsión metieran un nuevo enanito de jardín. Dado que eran entonces diez concursantes, cuando se eligieran los tres finalistas habría en la terraza siete enanitos. Lo que no se sabe es quien haría el papel de 'Blancanieves', aunque mucho me temo que le tocaría al omnipresente Àngel Llàcer.

El tema de Iván