Paso a paso: Los gestos que evidencian el acercamiento de los Matamoros

Todo comenzó con un ‘Deluxe’ en el que Diego Matamoros criticó tanto a su padre como a su mujer, Makoke. Luego entró en juego Laura, también hija del colaborador de ‘Sálvame’ que, aunque se mantuvo neutral en un primer momento (iba a ser la madrina de la boda de Kiko), finalmente intervino en la polémica.

Varios PoliDeluxe, muchas entrevistas (en televisión y prensa) y una dura carta después, tanto Kiko como Diego guardaron silencio. Además, vimos cómo el colaborador limaba asperezas con Laura en el reencuentro de los reencuentros en ‘GH VIP’, un momento de lo más emotivo entre padre e hija.

Y, poco a poco, se han producido movimientos silenciosos ante las cámaras. Por ejemplo, Kiko echó un capote a su hijo exculpándole de la publicación de una foto en la que aparecían su madre y su hermana, que siempre han querido permanecer ajenas a los medios. También defendió a Laura de las críticas y vimos un encuentro lleno de complicidad.

Las semanas y los meses siguieron pasando y Diego llegó a reconocer en directo que no le importaría tener un acercamiento con su padre para, al menos, “saludarse” cuando se vieran.

Diego y Laura Matamoros tuvieron un conflicto con su representante y Kiko Matamoros les ayudó de algún modo. Aunque sin hablar con Diego, el colaborador hizo lo que pudo y Diego se lo reconoció: “En las desgracias la gente se une y agradezco a mi padre que nos esté ayudando”.

Ante estas palabras, Kiko se mostró colaborativo aunque, eso sí, con algún matiz: “Estoy dispuesto a hablar con total honestidad y respeto con mis hijos, no me niego, pero tampoco me abro a cualquier solución”.

Y no fue el único momento en que Diego necesitó la ayuda de su padre. El exconcursante de ‘Supervivientes’ fue denunciado por su expareja por agresión, algo que él negó y Kiko Matamoros afirmó en directo que podía contar con él para lo que quisiera.

Tras la polémica con su expareja, que acabó con un acuerdo con la Fiscalía, por el que Diego fue condenado a 31 días de trabajos a la comunidad y a 8 meses de alejamiento, pareció acercarse a su padre dejando abierta la posibilidad de retirar la demanda que había presentado.

La participación de Laura en ‘Supervivientes’ acabó por unirles de algún modo. Mientras en otras ocasiones padre e hijo no podían compartir espacio en un plató, defender a Laura provocó su encuentro ante las cámaras. Pero lo que supuso un antes y un después fue la carta de Kiko a su hija en Honduras. Se la entregó Diego y a ella le emocionó tanto por lo que le decía su padre como por el hecho de que se la diera su hermano.

A su vuelta de Honduras, Diego agradeció de nuevo el gesto de su padre e, incluso, habló de arreglar su situación…

Y el punto álgido llegó el día de la final de supervivientes. Laura Matamoros se echó en brazos de su novio y luego en los de su padre. Fue entonces cuando vio a Diego, alargó la mano para que se acercara y, sin quererlo, provocó el primer (casi) abrazo de padre e hijo.

¿Veremos el abrazo definitivo? ¿Darán por terminada la polémica? Sólo el tiempo nos lo dirá pero nosotros ya estamos deseando que se produzca.