Raquel Morillas ('GH3') ha superado su ludopatía: “Llevo más de un año sin jugar”

La última vez que supimos de ella fue hace justo un año, momento en el que Raquel Morillas se sentó en el plató de 'Sábado Deluxe' para compartir su gran pesadilla entre lágrimas: estaba en la ruina por culpa de su ludopatía. “Pedí créditos en el banco por valor de 7.000 euros y me lo gasté. Ahora mismo tengo menos 172 euros en la cuenta”, dijo en septiembre de 2016. Además, enganchada al juego desde los 18 años, desveló entonces que se fundió los 400.000 euros que llegó a ganarse en televisión. En ese grito de auxilio, parecía que la concursante de ‘Gran Hermano 3’ estaba dispuesta a luchar de verdad para vencer sus adicciones definitivamente.

Ahora la propia Raquel, que luce un pelo muy corto, desvela a ‘Outdoor’ que su tratamiento contra la ludopatía la mantiene a salvo. “Estuve enganchada al juego y me gasté todo lo que tenía, pero, gracias a Dios y a mi constancia, llevo más de un año sin jugar”, confiesa. En esta recuperación también ha tenido que ver mucho su novia, con la que lleva ya “siete años”, aunque la madrileña prefiera no hablar de ella.

No hay duda de que, a sus 40 años, Morillas disfruta al fin de una estabilidad en todos los sentidos, tanto personal como profesional. “Vivo en Casteldefels –localidad costera situada en la provincia de Barcelona–. Trabajo en una empresa que se dedica a reformar baños. Sobre todo, a cambiar bañeras por duchas”, explica la tercera expulsada de ‘GH3’. “Estoy de coordinadora”, aclara.

En conversaciones con Outdoor, Raquel asegura que no tiene ningún interés en volver a la pequeña pantalla y eso que ya demostró ser un animal televisivo, tanto cuando entró ‘Gran Hermano’, en abril de 2002, como cuando abandonó de la casa de Guadalix un mes después. Cabe recordar que fue colaboradora habitual de ‘Crónicas Marcianas’, ‘El programa de Ana Rosa’ y ‘El gran debate’. Sin embargo, dice que ya no le compensan las ofertas que le recibe: “Sí me han tentado pero hay algunas cosas que no merecen la pena”.

Morillas lo afirma tan tajantemente porque siente que está en otra etapa: “Ahora mismo tengo una vida muy tranquila”. Pero ojo, que eso no significa que la madrileña descarte por completo un futuro regreso a la televisión: “Un ‘Gran Hermano VIP’ o un ‘Gran Hermano VIP’‘Supervivientes’, avisa. “Sólo que no me llaman”, añade entre risas. ¿Aparecerá en las próximas ediciones de estos ‘realities’ de Mediaset? El tiempo dirá.