Tras las quejas de Mila Ximénez a su entrenador por la dureza de los ejercicios, Diego ha decidido cambiarle el entrenamiento por una sesión de pilates. A la colaboradora le ha gustado el cambio y ha estado más positiva, pero ha confesado que se saltó la dieta: "Anoche fui a cenar y me comí un solomillo de buey con patatas fritas. Y de postre, una crema catalana con chocolate por encima".