Gracias a un testigo sabemos que María José Campanario ha estado de viaje en América y, quizás, se ha realizado algún arreglo estético en el "culete" porque le sacaron "hasta tres litros de pus del culete". Mientras que la Campa estaba convaleciente, su marido se dedicaba a pedir recados a las enfermeras que trataban a su mujer.