Kiko Matamoros se emocionaba enviándole un mensaje a su hija Laura, también hablando del reencuentro con dos de sus hijas, pero Diego Matamoros duda. No cree que su emoción sea falsa, pero no entiende que no dé pasos adelante para cambiar la situación: “Me sorprende que en un plató te pongas a llorar y después no haya nada fuera”.