El colaborador de 'Sálvame', Kiko Hernández, ha contado que Yola Berrocal, cuando quería vender o neceistaba dinero, llamaba ella misma a los fotógrafos a los que no cobraba nada, y les decía dónde y con quién iban a estar. Su finalidad era que la fotografiasen con gente "muy popular" para luego hacer programas de televisión.