Jorge Javier: "De lo único que me arrepiento de es de haberle tendido la mano a Aída"

La bronca que Jorge Javier Vázquez echó a Aída Nizar durante la Gala 10 de 'Supervivientes' por haber mantenido con Rosa Benito una macabra conversación sobre Ortega Cano terminó convirtiéndose en una gran polémica . La actitud de la superviviente, altiva y desafiante, llevó al presentador a espetarle que es "una mala persona" y añadir que en otro momento no la hubiera llamado mala, sino "hija de puta".

La madre de Aída entró en juego provocando al presentador y justificando la actitud de su hija, un hecho sorprendente dado que las imágenes en las que Aída mirába a cámara y se santiguaba mientras preguntaba a Rosa "¿Dónde le gustaría a Ortega Cano ser enterrado?" o "¿Crees que Ortega Cano está siguiendo tu paso por el concurso?" dejaban evidencia de que la mala intención de la superviviente.

Un día después de los polémicos acontecimientos y tras haber recapacitado sobre lo ocurrido, Jorge Javier Vázquez quiso sincerarse en el 'Deluxe' sobre ello: "Únicamente me arrepiento de algo que no tiene nada que ver con estos términos ni con las formas, me arrepiento, de verdad, de todo corazón y muy sinceramente, y me considero un auténtico imbécil por haberle tendido mi mano a Aída Nizar y a la madre durante la primera tanda de la edición de 'Supervivientes'.

Yo he sido de los que han defendido a Aída y a la madre incluso, aquí cuando venía la apoyábamos y decíamos 'tiene gracia, se maneja bien en un plató, Aída Nizar también tiene gracia' y me arrepiento de haberles tendido la mano, porque a mí me parece que ha actuado muy mal.

Y sobre la madre, no sé, la gente podrá juzgar y está en todo su derecho, porque todos cuando estamos en el salón de nuestra casa opinamos sobre si un presentador pierde las formas o no las pierde, si gusta o no gusta, pero al final es que yo me he encontrado con una auténtica provocadora , que es la madre de Aída y yo creo que, en este caso, Aída Nizar es una víctima de su madre. Ahí la persona que tiene la responsabilidad de que Aída Nizar sea Aída Nizar es su madre".

La actitud de Aída Nizar durante su conversación con Rosa, en la que no paraba de hacer gestos a la cámara como si de un triunfo se tratara el hecho de estar hablando con la concursante sobre Ortega Cano y jugar con su ignorancia, llevó al presentador a pensar que Aída traía muy pensada la escena desde España: "Yo estoy convencido de que Aída viajó a Honduras con la conversación preparada, estoy seguro".

Jorge Javier quiso dejar claro que, aunque Aída pensara que la organización de 'Supervivientes' la había enviado de vuelta a Honduras para pillar a Rosa Benito por banda y soltarle una serie de pildoritas para desestabilizarla y hacerla pensar de más, eso era totalmente falso, ya que el programa le advirtió que no podía comentar nada que tuviera que ver con el exterior.

Para aclarar sus dudas, el presentador preguntó a Kiko Hernández, una de las últimas personas que hablaron con Aída antes de volar a Honduras, si ella le había comentado algo sobre esta sucia jugarreta. El colaborador aseguró que no, porque de haberlo hecho no habría dudado en pararle los pies: "Yo juro por mi sobrino que a mí jamás me ha dicho eso, porque si me lo dice, yo le digo 'estás loca', pero que fuera convencida de hacer eso, no te digo que no, porque eso no sale de la noche a la mañana".

Otra de las preocupaciones del presentador era que Rosa había dado una segunda oportunidad de corazón a Aída, sin saber que ésta lo único que pretendía con ese acercamiento era jugar con sus sentimientos y hacerle daño, por lo que tenía claro que en cuanto Benito regresara de 'Supervivientes' y viera las macabras imágenes, iba a tener ganas de decirle unos cuantos improperios: "Después de las bonitas palabras de Rosa sobre Aída, cuando vuelva a España y vea la intención que tenía, le van a dar ganas de decirle que es una auténtica hija de puta".

Los colaboradores recordaron a Jorge Javier que no era la primera vez que un presentador había dicho esas tres palabras a Aída Nizar. Todos recordaron el cruel episodio en el que la superviviente dijo a un minusválido que "Dios da a cada uno lo que se merece" y que llevaron a Javier Sardá a soltarle en directo que "si en público he dicho que Bush era un hijo de puta, hoy digo que tú, Aída, eres una hija de puta".

Jorge Javier comentó que, en su caso, lo de menos era el calificativo, ya que según él los hechos superaron esas tres palabras: "A mí lo de hija de puta me parece una mera anécdota con todo lo que pasó. Estoy seguro que ayer la gente que estaba viendo el programa desde su casa emplearían ese calificativo, y lo que quiero decir es que los presentadores de televisión somos personas como las que están sentadas en sus casas, que vivimos, que sentimos, que nos emocionamos y que nos cabreamos".

Kiko Matamoros, antes de concluir, quiso preguntar a Jorge Javier, ya que él había podido ver la conversación íntegra entre Aída Nizar y Rosa Benito sobre Ortega Cano, si esa parte no emitida podría comprometer a Rosa por haber hablado sobre la intimidad del torero. El presentador le contestó que no: "Habla de la relación que tienen los Ortega con los Mohedano y Rosa habla muy bien de Ortega y de la familia, o sea, que no, no comprometen en absoluto a Rosa, comprometen muchísimo más a Aída".

El mensaje de la familia de Carlos Parra

Kiko Hernández pidió la palabra para contar que había recibido dos mensajes de la familia de Carlos Parra, fallecido tras el accidente de tráfico de Ortega Cano el pasado 28 de mayo. Uno de los mensajes iba destinado a Jorge Javier y el otro a la audiencia:

"Mucho ánimo y muy bien por Jorge Javier. Dale las gracias de nuestra parte por ser como es y por decirle a Aída lo que se merecía. A la audiencia les dice, no darle más minutos de televisión a Aída Nizar, aunque haga ganar dinero a las cadenas de televisión, aunque suba las audiencias, no llevarla más a televisión, es muy mala persona, por decirlo suave, no tiene corazón y tiene la sangre muy fría. Sería justo no verla en la tele nunca más".

Los colaboradores muestran su apoyo a Jorge Javier

Kiko Matamoros: "En lo único que creo que no habías estado acertado era en la utilización del término, pero en cualquier caso era lo que estábamos pensando el 90% de las personas que estábamos viendo la gala, por lo tanto también entiendo tu actitud, porque es muy difícil ante situaciones de ese tipo mantener la compostura, porque todos somos humanos. Lo que quiero reiterar es mi aplauso y mi orgullo de trabajar contigo".

Belén Esteban: "Estoy de acuerdo con todo lo que ha dicho mi compañero, pero quiero decir otra cosa. Si la madre de Aída se sintió mal, mi madre muchas noches se ha sentido mal escuchando a su hija diciendo de todo de mí y de mi familia, así que la pusiste en su sitio y yo te lo agradezco".

Kiko Hernández: "Ayer cuando estaba viendo la gala estuve hablando con la familia de Ortega Cano y yo imagino que este mensaje que te voy a dar también, porque me he escrito mucho con la familia de Carlos Parra, lo pongo en su boca. Me dijeron que, de su parte, muchísimas gracias porque fuiste la voz que ellos necesitaban ayer en la gala de 'Supervivientes'".

Lydia Lozano: "Creo que llevaste muy bien el tema, creo que no eras un Jorge Javier que había perdido los estribos. Tú lo que dijiste es que en otro momento la hubieras llamado una palabra que empieza por 'h' y termina por puta, pero es la madre la que lo lía todo. En ningún momento veo que como presentador no sabes llevarla y la llamas hija de puta, no vi a ese Jorge Javier, vi a un tío que lo decía claramente".